7

Werewolf: The Apocalypse – Earthblood

Werewolf: The Apocalypse - Earthblood

Una de las franquicias que más han explotado en cuanto a números de proyectos en los últimos años es sin duda World of Darkness, el juego de rol que nos va a dar en los próximos meses Vampire: The Masquerade, Wraith: The Oblivion, ya hemos tenido varias VN de Vampire, y ahora es el turno de adentrarnos en la cultura de los hombres lobo con Werewolf: The Apocalypse – Earthblood.

Es interesante ver cómo este universo se expande tanto y tan rápido, pero sobre todo, me gusta que se esté dando la oportunidad de aprovechar una licencia tan rica por estudios AA. Es el caso de Cyanide Studio un equipo francés que me suele gustar lo que hace, gracias a propuestas tan interesantes dentro del sigilo como los dos Styx, que pese a sus limitaciones, encantarían a cualquier amante del género. Con la idea de aprovechar esos conocimientos del género del sigilo, pero abrazando una licencia paranormal ambientada en el mundo moderno, y dando más énfasis a la acción, tenemos todos los ingredientes para una aventura la mar de entretenida. Así que aullad como si hubiera luna llena, que esto es Werewolf: The Apocalypse – Earthblood

.

En cuanto a la historia, no hace falta que tengáis mucha idea sobre el universo de World of Darkness, ya que nos dan el contexto necesario nada más empezar. Básicamente, hay una serie de espíritus/fuerzas cósmicas en constante lucha, destacando Gaia para representar la pureza de la Tierra, y el Wyrm, que representa la corrupción. Gaia está perdiendo, ya que la humanidad está destruyendo poco a poco el planeta, teniendo los Hombres Lobo que pararles los pies.

Werewolf: The Apocalypse - Earthblood

En esencia, estamos ante una historia ecologista, todo enmascarado con espíritus, fuerzas malignas y demás, pero está todo más claro que el agua. En el bando de los Hombres Lobo, conocidos como Garou en este universo, tenemos a nuestro protagonista, Cahal. Tras una misión que sale mal para atacar a la malvada compañía Endron (que se ha aliado con el Wyrm para causar poco a poco el Apocalipsis), se exilia 5 años, volviendo a su manada para intentar salvar a su hija y finiquitar la lucha contra Endron.

El argumento de Werewolf: The Apocalypse – Earthblood no es nada del otro mundo, pero siempre me han gustado las historias de sociedades secretas y elementos sobrenaturales, con que he disfrutado todo el viaje de Cahal por parte de EEUU en su viaje de terrorismo ecológico, pero que es necesario para evitar que la Tierra se vaya al garete por influencias cósmicas negativas. Los malos son muy malos, pero hay varios personajes que conoceremos por el camino más o menos interesantes, eso por no mencionar al pobre Cahal.

Dicho esto, todo es básico, básico, básico, por lo que el argumento al final es más una excusa para ir moviéndonos de un lado para otro, que el motor principal de la aventura. No me parece mal, ya que tiene ese toque de Serie B suficiente como para hacer que se coja cariño a los personajes, pero no es tan importante como para tomarlo excesivamente en serio, como podría ocurrir en otros RPGs de acción del estilo de Deus Ex: Human Revolution.

Werewolf: The Apocalypse - Earthblood

Esta comparación con Deus Ex quizá es excesiva, pero Werewolf: The Apocalypse – Earthblood claramente intenta ser un juego de rol y acción. Esto lo consigue por dejarnos elegir qué dirá Cahal en varios momentos, poder mejorar nuestras habilidades para potenciar lo que consideremos más apropiados y cosas así. Sin embargo, los elementos roleros son tan, tan básicos, que creo que es más apropiado hablar de un juego de acción y sigilo.

La gran mayoría de las zonas podemos superarlas con sigilo o a base de tortas, con otras partes donde podremos progresar conversando, o con combates obligatorios. Como Garou, tenemos dos formas lobeznas perfectas para ir con sigilo o con acción.

Para pasar desapercibidos podemos convertirnos en nuestra forma Lopus, que es básicamente un lobo grande. Por nuestra menor altura, podremos usar las coberturas para escondernos, además de escondernos por los conductos de ventilación para usar así rutas más discretas por las que infiltrarnos. Gracias a esta forma más sigilosa, podremos ir poniéndonos por la espalda de los enemigos para acabar con ellos de manera silenciosa, posicionarnos para convertirnos en humanos, usar nuestra silenciosa ballesta y pegar un tiro a la cabeza, o incluso atraer enemigos con un buen ladrido.

Werewolf: The Apocalypse - Earthblood

Las opciones de sigilo no son, ni de lejos, tan numerosas como en los Styx del estudio, ya que los mapas son más horizontales (aunque de cuando en cuando hay alguno con varios niveles de altura), no hay mecánicas de escalada, y la IA es mucho más básica. De hecho, no podemos ni mover los cuerpos, con algún que otro bug de clipping que hizo que me detectaran, puesto que un cuerpo atravesó una barandilla, y los otros soldados veían el cuerpo porque se quedó a la mitad atravesado, con una parte oculta y otra no.

El motivo de este sistema de sigilo más limitado es que ahora podemos liarnos a tortas en cualquier momento al entrar en modo Crinos. Aquí seremos unos hombres lobo de manual, conviertiéndose entonces Werewolf: The Apocalypse – Earthblood en una especie de beat’em up en 3D. Los movimientos que podemos hacer son algo básicos, con una forma más rápida pero débil, y otra más lenta pero potente. Cada una tiene sus ataques especiales que consumen Ira, además de poder recuperar salud, algo esencial.

Las peleas son muy sencillas, pero logran ser machacabotones y entretenidas. Hay una buena variedad de enemigos, con algunos que nos disparan desde lejos balas de plata, limitando así la cantidad máxima de salud que podemos recuperar, otros escopeteros que nos atacan desde cerca, o incluso soldados en armaduras de combate que me recordaban a Ripley en Aliens, incluso con varias clases dentro de este grupo.

Esta variedad de enemigos se aplica también a las partes de sigilo, puesto que habrá algunos enemigos a los que no podremos matar de manera sigilosa, por lo que solo podremos esquivarlos. Incluso los guardias pueden llevar cascos, lo que nos impide matarlos automáticamente con la ballesta, lo que nos fuerza a buscar otras rutas si queremos mantener el sigilo.

Algo que me ha gustado es que los escenarios están bien pensados para ambos estilos de juego. Si vamos con cuidado, me lo pasaba en grande buscando los ordenadores que desactivaban cámaras de seguridad o abrían puertas, ir despachando a soldados uno a uno, o incluso saboteando las puertas por las que podían aparecer los refuerzos. Si luego me pillaban, al menos había mermado las fuerzas enemigas, y había tenido un poco de la experiencia de ambos métodos de juego.

En otras partes de Werewolf: The Apocalypse – Earthblood incluso podemos infiltrarnos de manera social, usando el diálogo. Lo mismo para completar algún objetivo secundario, y aunque no es lo normal en el juego, cuando nos dan la opción, es genial, y funciona relativamente bien.

Es por todo esto, que al final sentía que estaba ante una especie de Deus Ex: Human Revolution, pero en vez de usar armas de fuego, usaba las garras de Cahal. Es cierto que todo es mucho más simplón y hasta cutre, ya que la IA es muy básica, los escenarios no ofrecen tanta interactividad y el combate puede pecar de simple. Pero vaya si este bucle jugable de sigilo, zonas de acción, y partes narrativas no funciona de maravilla.

Cada misión es bastante lineal, pero entre ellas, visitaremos varios hubs más abiertos. En todos los escenarios hay bastantes coleccionables, que o bien nos dan más información del mundo o sus personajes, o nos dan puntos de experiencia (literalmente aspiramos espíritus de las plantas) para poder desbloquear más habilidades. Estos desbloqueos son útiles, y si vais a jugar de manera sigilosa, os recomiendo ir de cabeza a por la mejora que hace casi invisible al Lupus, ya que así tendréis una mayor movilidad mientras nos mantenemos ocultos como el lobito.

El resultado es un conjunto que me enganchó mucho más de lo que me esperaba, ya que siempre iba topándome con algo nuevo, y todo era tanto satisfactorio como divertido. Además, Werewolf: The Apocalypse – Earthblood tiene la duración adecuada para no hacerse pesado, al durar unas 10 horas, para así ofrecer una experiencia completa, pero sin meter relleno innecesario.

Werewolf: The Apocalypse - Earthblood

A nivel técnico, sí que podemos ver más las costuras a Werewolf: The Apocalypse – Earthblood. Para empezar, he jugado a la versión de PS5, y si me dicen que es un juego de PS3, hasta me lo podría creer. Estamos ante un título AA de manual, ya que no luce mal del todo, con algún detalle que está bien, como el desenfoque de la cámara en varios momentos de los combates para simular la fuerza de los ataques de Cahal. Lo mismo con el efecto de la sangre, siendo una delicia ver la habitación tras un combate y ver que está todo lleno de «ketchup», lo que nos muestra lo poderosos que son los Garous cuando se les cabrea.

Sin embargo, todo está bastante limitado y es simple, con algunas animaciones un poco ortopédicas, NPCs clónicos, animaciones faciales muy cutres, etc. No llega a ser un desastre absoluto al no ser el foco de atención, pero claramente es un juego con cierto aroma de Serie B. Sobre mejoras para la next-gen, no creo que haya nada, aunque al menos, los tiempos de carga son prácticamente inexistentes. Una pena que Cyanide no haya aprovechado el DualSense, porque funciona exactamente igual que un mando tradicional. Eso sí, es curioso cómo las cinemáticas pre-renderizadas se ven más pixeladas que el juego principal, cuando debería ser el momento de sacar músculo gráfico.

En cuanto al sonido, la música ofrece tanto temas muy rockeros como otros un poco más synth para las partes de acción y sigilo respectivamente. Las composiciones no son las más memorables del mundo, pero quedan de lujo dentro del contexto de la acción. Las voces en inglés (hay subtítulos en castellano) están bastante bien, destacando sobre todo el trabajo del actor de Cahal, algo clave para que podamos encariñarnos del personaje.

Werewolf: The Apocalypse - Earthblood

Conclusión

He disfrutado mucho Werewolf: The Apocalypse – Earthblood, y me ha logrado enganchar desde el principio hasta el final. Ahora bien, tengo muy claro que este es un AA de manual, con recortes obvios en muchos aspectos, como los gráficos.

Ahora bien, el juego es muy divertido, y me ha recordado a los juegos de acción de la era de 128 bits, que solo por eso me ha atrapado desde el primer momento. He vuelto a la infancia cuando jugaba a The Indestructible Hulk mientras destrozaba a soldados en la forma de Crinos, para luego pasar al sigilo como un adorable (y mortal) lobo al estilo de Deus Ex.

No llega a ser igual de bueno que ambos, pero se crea una combinación de sigilo, beat’em up y rol que funciona muy bien. Si este es el nivel de los demás juegos de World of Darkness que vamos a recibir, a tope con ellos, porque los AA son algo maravilloso (momentos cutres y «jank» incluido), y Werewolf: The Apocalypse – Earthblood me ha recordado por qué los disfruto tanto.

7

Nos consolamos con:

  • Buena combinación de acción y sigilo
  • Constantemente se van añadiendo nuevos tipos de enemigos tanto en el combate como en el sigilo
  • Esa nostalgia por los juegos de acción de la era 128 bits
  • Logra enganchar de lo lindo

Nos desconsolamos con:

  • Aunque está bien recordar a los juegos de 128 bits, igual técnicamente se le acerca más de lo deseable
  • La IA no es muy brillante que digamos
  • Algún que otro bug con las físicas, que puede desbaratar nuestras tácticas
  • No poder mover los cuerpos para intentar mantener el sigilo

Análisis realizado gracias a un código proporcionado por Nacon.

Ficha

  • Desarrollo: Cyanide Studio
  • Distribución: Nacon
  • Lanzamiento: 04/02/2021
  • Idioma: Voces en inglés y textos en español
  • Precio: 49,99€

Comentarios

    • Hola! Me temo que no. El único arma a distancia que podemos usar es la ballesta. No podremos coger ni las pistolas ni los rifles del enemigo, ni tampoco hackear las torretas enemigas para que disparen a sus aliados.
      Saludos!!

Responder a Pablo A Canciani Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *