No he jugado a ningún Metroid hasta la fecha, pero tras probar Metroid Prime 4: Beyond en su versión para Nintendo Switch 2, tengo claro que debo ponerme al día con al menos, esta saga sub-saga de Samus Aran lo antes posible. Fue de los juegos que más me gustaron del evento donde probar la consola, y pese a no tener nada de contexto sobre lo que estaba pasando en pantalla, vaya si quiero seguir jugando.
¿Los motivos? Dos de las armas para nada secretas de la consola, y que se aprovechan al máximo en esta edición mejorada para Switch 2: el modo rendimiento a 120 FPS y el uso del ratón. Lo primero es más que obvio, al permitir que el título se mueva a 1080p para se siga viendo muy nítido, pero vaya increíblemente fluido. Se nota mucho, al darnos unos tiroteos frenéticos donde todo se mueve como la seda. Pero es el ratón el que cambia las reglas del juego, y que demuestra el potencial que tiene este modo de juego para los FPS en la consola.
¡Nos invaden los aliens!
La demostración de Metroid Prime 4: Beyond era lo que parecía ser el inicio de esta nueva aventura. Una base militar está siendo atacada por unas fuerzas alienígenas, con que Samus se une al resto de soldados para hacerles frente. No me preguntéis quiénes son las dos facciones, porque no tengo ni idea. Pero vaya si no es genial ver a Samus hacer una entrada triunfal con su nave en una secuencia de lo más espectacular.
La parte visual es muy sorprendente, al verse todo de escándalo. La lluvia para dar dramatismo a la batalla y hace todo incluso más vistoso, apreciándose la calidad de las texturas o la iluminación para ofrecer un despliegue de medios del más alto nivel. Todo me recordaba bastante a Halo, lo cual siempre es bueno al hablar de aliens, militares e invasiones con un súper soldado cambiando las tornas del combate.
A lo largo de esta demo, que es muy lineal al plantearnos unos cuantos enfrentamientos mientras nos adentramos en la base, se iban planteando más tiroteos, un pequeño puzzle aquí o allá usando el escáner o la forma bola, y todo iba a un gran ritmo. Una escalada en la intensidad y escala del conflicto hasta llegar al jefazo, donde la precisión era clave, y por tanto, también el modo ratón.
Ahora el ratón y ahora el stick
Sin ser fan del combo de teclado y ratón en los shooters, Metroid Prime 4: Beyond pedía a gritos usar el modo ratón, incluso para los que no somos muy dados a usarlo. ¿El motivo? Combinarlo con el fijado de los enemigos. Así no tenemos que controlar por completo la cámara con el ratón pidiendo movimientos rápidos y precisos a lo DOOM. En su lugar, hacemos ajustes pequeños una vez estamos ya centrados en el objetivo de turno.
Es ese detalle el que ha hecho que me sintiera de lo más cómodo al usar este método de control, y el propio diseño del juego busca esta precisión adicional haciendo ajustes pequeños de manera constante. Algunas puertas nos piden disparar a sus cuatro interruptores repartidos en las esquinas, tras haber fijado la cámara en su centro. Esto se lleva a su máxima expresión con el jefe final. Tiene varios puntos débiles repartidos por su cuerpo, que irá protegiendo con su escudo tapando unos u otros, por lo que tendremos que ir cambiando entre cuál apuntamos rápidamente. ¿La mejor manera de hacerlo? Con el ratón.
Si queremos apuntar a esos puntos débiles, ¡a activar el ratón!
Así siempre podremos usar el otro Joy-Con para centrarnos en el movimiento, creando una combinación de estilos de juego fantástica. De hecho, si no somos de ratón, podemos dejar de usarlo en cualquier momento. Sencillamente pasamos a usar el stick como toda la vida en consola y listo. ¿De vuelta al ratón? Pues se pone el mando contra la superficie de turno y de vuelta a tener esa precisión extra. La mecánica de hacer ajustes en el apuntado tras fijar la cámara también sin el ratón, usando en ese momento los giroscopios del mando.
Poder cambiar de manera dinámica entre todos estos métodos de control es brillante, adaptándose a la manera de jugar de cada usuario. Ya sea sólo usando el ratón, sólo el stick, o en combinación con el fijado de cámara, esta variedad de opciones siempre se agradece. Lo único malo del modo ratón, por ahora, es cuando nos obligan a hacer más acciones aparte de disparar. Este jefe nos obligaba a hacer esquivas, saltar o convertirnos en bola para esquivar sus ataques, y ahí la posición de la mano necesaria dada la estructura de los Joy-Cons no es nada cómoda. Por eso, usar este método de manera ocasional en vez de todo el tiempo creo que será lo ideal.
La mejor cazarrecompensas espacial está de vuelta
Con esta toma de contacto de Metroid Prime 4: Beyond me quedo no sólo con lo bien que funciona el combinar los métodos de control que ofrece Switch 2, sino con lo rematadamente bueno que es. Tanto, que sin entender lo que estaba pasando, estoy ya deseando adentrarme en la saga para que cuando salga el juego, esté preparado para acompañar a Samus en esta gran batalla.
Aún queda esperar hasta algún punto de 2025 para que llegue ese momento. Y no podemos olvidar que el juego también estará disponible para la primera Nintendo Switch. Así que ya sea ahí o en Switch 2, está claro que Metroid Prime 4: Beyond va a ser toda una joya para los amantes de los shooters y la ciencia ficción.
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