
Con las sagas deportivas, hay años donde toca simplemente iterar, y otros donde renovarse por completo. En MotoGP 25, el equipo italiano de Milestone ha hecho esto último, con muchos cambios para iniciar una nueva etapa para la franquicia. ¿Es una revolución total? No necesariamente, pero por suerte, estamos ante una entrega que no se limita a actualizar plantillas de pilotos y circuitos.
¿Qué novedades tenemos? Lo más obvio es el cambio al Unreal Engine 5, que siempre suena rimbombante. Después la presencia de nuevos tipos de motos para carreras fuera de las competiciones oficiales. Y por último, nuevas opciones a la hora de establecer las físicas. ¿Son suficientes para que esta edición suba al podio? Poneos el casco y el mono, que vamos a descubrirlo.
Motos para todos los públicos
No soy mucho de juegos de motos, pero volví a la franquicia con la entrega del año pasado… Y fue duro. No porque fuera un mal juego, sino por su mayor énfasis en el realismo. En MotoGP 25 la cosa cambia por completo, ya que Milestone ha dado la opción de un «Modo Arcade». Esto simplifica muchísimo el control de la moto, recordando entonces a la experiencia más Simcade de las entregas de PS2 y de Bandai Namco.
Está claro que no es un cambio para todo el mundo, y por eso es bueno que sea sólo una opción. Si os gustan los aspectos más de simulación, siguen presentes. Pero si no queréis acabar en el asfalto en cada curva y no tenéis ni tiempo ni ganas de pasar horas hasta dominar la moto en vez de al revés, pues sólo basta con activar este modo.
De todas formas, algunos aspectos realistas se mantienen, como el sistema de normas. A veces es quizá hasta algo restrictivo, pero no podremos empezar a jugar como si esto fuera un Road Rage. Golpeos a otros pilotos, adelantamientos no permitidos y mucho más nos acabará penalizando. Lo mismo ocurre con el planteamiento de los grandes premios, gracias a las diferentes pruebas de clasificación, los ajustes mecánicos que se pueden ir haciendo, etc. La sensación de inmersión sigue muy presente, pero ahora MotoGP 25 sencillamente se abre a un público mayor.

Después de infinitas derrotas en la anterior entrega, ¡qué gozada poder ganar gracias al Modo Arcade!
Hay vida más allá de la MotoGP
La otra gran novedad del juego son las carreras fuera de la competición oficial, divididas en las divisiones Motard, Flat Track y Minibikes. Son en esencia carreras off-road o en motos pequeñas, para una experiencia mucho más directa. Aquí sólo podemos jugar con las físicas en modo Simulación, pero como no son vehículos tan exigentes, hay una mayor sensación de estar ante competiciones «Simcade», por lo que son competiciones bastante accesibles.
¿El problema? Es un añadido que se queda en casi algo anecdótico. Sólo hay dos entornos con dos circuitos, sin ningún tipo de progresión, por lo que después de probar un par de veces estas modalidades, no hay motivos para regresar a ellas. Como primer acercamiento o para un break están bien, pero claramente esta parte no es un pilar del juego.

Como un primer acercamiento a esta clase de motos está bien… Pero no hay chicha alguna en estas carreras
El que lo sigue siendo, sobre todo si jugamos en solitario, es el Modo Trayectoria. Aquí podremos ir ascendiendo en competiciones de Moto 3, Moto 2 y MotoGP. Si empezamos en lo más bajo, es genial ir notando la progresión y las diferencias en el comportamiento de las motos de cada categoría. La gracia del modo este año es que podemos elegir entre diferentes «rutas», planteando en el proceso una progresión diferente para la parte mecánica de la moto. No siempre se nota, pero al menos nos plantea diferentes retos y objetivos.
¿Es algo memorable? No realmente, pero creo que es un buen primer paso para hacer que este modo gane más en profundidad y diversión en próximos años. Además, las nuevas carreras para intercalar los grandes premios encajan bien, y si aprovechan mejor esta combinación de carreras puede quedar una Trayectoria de lo más interesante.

Tener este control en la Trayectoria hace que al menos podamos decidir cómo enfocar nuestra carrera y crea un poco de variedad
De cero a campeón
Otra modalidad importante es el MotoGP Academy. Al contrario de lo que su nombre puede indicar, no se trata de una serie de lecciones donde aprender varios trucos o técnicas. Es en esencia un modo contrarreloj, donde sólo podemos jugar con las físicas realistas, y la meta es dominar cada curva de cada circuito. Así que al final, sí es un poco una academia, pero donde los profesores y los alumnos somos nosotros mismos a base de repetir sectores de manera constante.
Independientemente de en qué modo juguemos, si hay otros rivales, una opción a priori interesante de MotoGP 25 debería de ser el de la dificultad adaptativa. Si vamos bien, los rivales apretarán más, pero si nos quedamos rezagados, nos darán algo de cancha. Sobre el papel funciona, pero en la realidad da pie a momentos irrisorios. Me ha pasado varias veces de estar sacando records de vuelta en varios circuitos y haciéndolo impecable… Para ver cómo alguien que iba muy atrás de repente empieza a ir más rápido. Es un rubber banding como el que hacía tiempo que no veía, sobre todo en un juego realista. Así que mi recomendación es trastear con los otros niveles y quedaros en uno cerrado, para que no haya situaciones surrealistas como estas.

Ojo con la lluvia, que puede hacer que nos caigamos con más facilidad, incluso en el Modo Arcade
A nivel de competición contra humanos, tenemos cómo no los piques contra el crono del Academy, o las competiciones frente a frente de los modos online. Aquí hay Cross-Play entre todas las plataformas (excepto Switch), con que si queremos, hay juego para mucho, mucho tiempo.
Y por último, están los aspectos técnicos. El salto a Unreal Engine 5 no se nota en exceso, ya que todo se sigue viendo muy similar a lo visto en la anterior entrega. Sí hay alguna mejora, como un sonido que me ha parecido más contundente, pero a efectos prácticos, no hay nada excesivamente tangible. Seguro que a nivel de infraestructura es otra historia, pero eso, son cambios más en el motor que en la carrocería o como se llame en el caso de las motos.

Los inicios con todos los pilotos son siempre de lo más intensos
Conclusión
De todos los cambios que trae MotoGP 25, varios se han quedado algo a medias, excepto uno: el modo arcade. Creo que es justo lo que necesitaba la saga, para que más usuarios como un servidor podamos disfrutar de unas cuantas carreras sin acabar frustrados a las primeras de cambios. Así como que te pica más el gusanillo por el deporte, cuando realmente puedes jugarlo en vez de estar constantemente en el asfalto.
Sólo por eso, recomiendo esta entrega. Es cierto que el cambio de motor tampoco es muy palpable en lo técnico, y que las nuevas modalidades fuera de las competiciones oficiales se quedan en algo anecdótico. Pero si justo esa complejidad que daban las físicas realistas de antaño era lo que os echaban para atrás, MotoGP 25 os recibirá con los brazos abiertos para un montón de horas de competición.
Nos consolamos con:
- El modo arcade es una adición fantástica para atraer a más usuarios
- El sonido de las motos es fantástico
- El modo Trayectoria está más trabajado que el del año anterior
- Los nuevos tipos de pruebas aportan algo de frescura extra…
Nos desconsolamos con:
- … Pero estas pruebas no tienen ningún tipo de profundidad
- La dificultad adaptativa está bastante rota y crea momentos que se cargan el realismo
- Si no os gusta el modo Arcade, apenas veréis novedades de peso respecto a la entrega anterior
Ficha
- Desarrollo: Milestone
- Distribución: PLAION
- Lanzamiento: 30/04/2025
- Idioma: Textos y Voces en Castellano
- Precio: 59,99 €
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