Últimamente, los DLCs se han asociado con algo negativo, cuando pueden llegar a ser algo muy bueno. Como muestra de ello tendremos The Following, la próxima gran expansión de Dying Light que va a aprovechar el éxito del juego y el feedback de los usuarios para ofrecer una nueva aventura de un tamaño colosal por apenas 15 euros.
Durante la Gamescom tuve ocasión de probar esta expansión en modo cooperativo, y la verdad es que bien podría pasar por una mini-secuela. Tendremos a nuestra disposición un mapa enorme del tamaño de todos los niveles del juego original juntos, junto a una nueva historia que continuará justo donde se terminó la aventura principal. Crane está ahora en una zona campestre cercana a Harram, donde un culto dice haber encontrado la cura al virus zombie, por lo que nos tocará investigar esta situación.
Trasladaremos todo nuestro equipamiento y nivel a la expansión, algo que nos vendrá de perlas para navegar esta nueva zona. El principio de la demo que pude probar nos situaba en una zona montañosa, teniendo que ir saltando por varios riscos, algo que nos hace recordar el genial sistema de parkour del título. Todo para terminar saltando a un lago, con una caída bastante espectacular.
Al volver a la zona marcada, vemos cómo nos han quitado nuestro equipamiento, dejándonos con lo puesto y poco más. Así que toca encontrar recursos para poder sobrevivir. Algo que afecta a la manera de movernos por el mundo es que este nuevo mapa es mucho más plano, sin edificios por los que saltar para evitar las hordas de zombies. Así que nos tocará movernos rápido y buscar cualquier obstáculo o elemento agrícola para superar con seguridad las zonas más de campo, ya que si nos ponemos a combatir, es fácil que nos terminen rodeando los zombies por todos lados.
Nuestra búsqueda de mejoras armas nos lleva a dos de los nuevos juguetitos de este DLC: una ballesta (algún desarrollador es muy fan de Daryl de «The Walking Dead»), ideal para matar a los enemigos de forma silenciosa y desde lejos, y una uzi, que nos vendrá de perlas para mantener a raya grandes grupos de enemigos.
Por el camino nos encontramos con un desafío para ver cuál de los dos jugadores es mejor tirador con la ballesta, por lo que también habrá nuevos desafíos en la expansión al jugar con los amigos, lo que dará mayor rejugabilidad.
Tras avanzar por unas cuantas zonas infestadas más, usando varios obstáculos más para evitar una confrontación directa, llegamos a un granero ocupado por el culto que da nombre a la expansión. Nuestro objetivo es acabar con los enemigos y escapar en los buggies. La elección de cómo asaltar la zona es completamente nuestra: con sigilo matando a los enemigos en silencio, o haciendo ruido pegando tiros a diestro y siniestro. Una tercera opción es no matar a nadie y escapar rápidamente, pero esto nos dará menos puntos sobre el culto, lo que nos dará más información sobre esta secta, siendo esta una nueva rama de experiencia.
Ahora sí, finalmente estamos en control de una de las novedades más importantes del DLC, y que más llamará la atención: los buggies. Al montarnos se iniciaba otro desafío, una carrera para ver cuál de los dos jugadores que estábamos jugando era el más rápido. Los buggies se podrán personalizar en lo visual, para que el vehículo sea un reflejo de nuestra personalidad o gustos personales.
El control de los vehículos era muy bueno, muy arcade y resultando una delicia arrollar a los zombies con el vehículo. Algo que noté es que nos darán puntos de combate al matar zombies atropellándolos, por lo que creo será una gran forma de lograr subir niveles de combate si no hemos llegado a su máximo antes de empezar la expansión.
Esta demo acababa al llegar al campamento aliado, que estaba siendo atacado por todo tipo de zombies. Esta primera toma de contacto con Dying Light: The Following ha sido inmejorable. El diseño de las nuevas zonas es genial y supone un gran contraste con lo visto en el juego original, mientras que las nuevas armas y el buggy ofrecen nuevas oportunidades jugables de lo más interesantes. De hecho, también será posible tener un aliado subido en la parte trasera del buggy para disparar a los enemigos, algo que no pude probar, pero que suena muy divertido al jugar en cooperativo.
Sinceramente, me costaba creer que toda esta expansión costar apenas 15 euros (o gratis para los que tienen el pase de temporada), pero así va a ser. Tendremos una nueva historia, un nuevo mapa, más armas, vehículos y más diversión cooperativa a un bajo precio para seguir dejándonos felices a los fans de este gran título de zombies, que en total prometen darnos unas 10 horas de juego según los desarrolladores. ¿Acaso se puede pedir más?
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