Los shooters de doble stick me encantan, y son un género en el que los desarrolladores independientes pueden ofrecer algo espectacular. Ahí tenemos Assault Android Cactus, uno de los mejores títulos del género desarrollado por un equipo bastante pequeño. Con esto en mente, esperaba bastante de Demon’s Crystals, de los chicos de Byte4Games y StarCruiser Studio, estando distribuido por Badland Games.
La premisa es muy sencilla: los Urdins son unos pequeños demonios que han sido las criaturas más poderosas durante mucho tiempo. Eso era hasta la aparición de los malvados Sarkon, Ghoros y Ornak, teniendo los Urdins que ponerse las pilas para derrotarles. Para ello tendrán que matar cientos de criaturas, recuperar los cristales que les dan sus poderes y patear unos cuantos traseros, o mejor, llenarles de balas.
La jugabilidad es de lo más sencilla que hay. Con el stick izquierdo movemos al personaje que hayamos seleccionado, y con el derecho disparamos en la dirección del stick. No hay ningún tipo de esquivas ni limitación en la munición. Esto es una pena, ya que a veces se queda algo corto, echando en falta poder dar una voltereta o algo para esquivar proyectiles.
El modo Arcade está compuesto por tres zonas con 8 fases cada una, terminando en un combate contra un jefe final. En cada nivel nuestro objetivo es superar un número determinado de oleadas en el tiempo indicado. En esta oleada tenemos que acabar con el número de enemigos marcado, recoger los cristales que aparecen en el escenario, o ambos. Esto tampoco es mucho problema, ya que muchos juegos del género se basan principalmente en esto.
El problema es que la jugabilidad momento a momento no es gran cosa. Los enemigos que nos atacan son bastante típicos, estando los zombies que nos atacan solo cuerpo a cuerpo, otros que aguantan más y que disparan, u otros que explotan al acercarse mucho. A lo largo del juego vemos alguna variación, pero esos son los tipos. Aunque al empezar a jugar podemos seleccionar a uno de los cuatro personajes, teniendo cada uno un arma visual diferente, al final todos funcionan de la misma forma.
El diseño de los mapas en Demon’s Crystals no es gran cosa. Tienen varios elementos interactivos y hasta trampas, pero no llega a sorprender en ningún momento. Al estar jugando y llenar todo de balas, muchas veces cuesta mucho ver los proyectiles enemigos, por lo que me encontré en bastantes momentos perdiendo vida sin saber muy bien por qué. Lo mismo ocurre con algunas trampas, que aunque nos estén haciendo daño, sobre todo en el primer mundo, cuesta ver por qué.
Según vamos matando enemigos o cogemos cristales, nuestro personaje irá subiendo de nivel, lo que aumenta algo nuestra vida y ataque. No es una progresión que sea muy palpable, costando ver dónde está la progresión. Como el nivel es independiente entre los personajes, si luego probamos con uno de nivel 1 en una fase avanzada, entonces sí que se nota porque haremos muy poco daño, pero si vamos del tirón con un único personaje, la progresión no se nota demasiado.
Como en todo buen shooter de doble stick, hay multitud de power ups que recoger en los escenarios. Algunos nos dan diferentes armas durante unos segundos, mientras que otros nos hacen gigantes para poder aplastar a los enemigos como si fueran hormigas. El problema de los potenciadores de las armas es que son números, por lo que hay que recordar a qué arma se refiere cada número. ¿No habría sido mejor poner un icono de un cohete para el lanzamisiles, por ejemplo? Eso ayudaría mucho para ver qué arma coge si podemos elegir entre dos potenciadores.
Los jefes finales, por otro lado, no están mal. Son combates largos, y aunque no llegan a sorprender, tampoco están mal. Como os podréis dar cuenta, no hay muchos niveles como tal, pero como ocurre en el género, Demon’s Crystals ofrece una gran rejugabilidad. Los diferentes niveles de dificultad limitan además el nivel máximo de nuestro personaje, lo que añade una capa extra de dificultad. En la dificultad estándar el juego es bastante complicado, con que preparaos para morir unas cuantas veces.
He criticado bastante la jugabilidad, pero como tal no es mala. Simplemente, es normalito, y tras propuestas dentro del género tan frenéticas o bien hechas, me esperaba algo más.
Junto al modo Arcade, hay un modo Ilimitado para ver cuántos cristales cogemos y enemigos matamos antes de que ellos acaben con nosotros, para luego comprar nuestra puntuación con todo el mundo. Algo destacable es el modo multijugador, que por desgracia solo es local. Hay modos centrados en el cooperativo, y otros en el competitivo. Estas opciones no están mal, pero es una pena que no podamos jugar con amigos a través de internet.
En cuestiones técnicas, el estilo de Demon’s Crystals es muy simpático, mostrando un estilo muy colorido y llamativo. Los escenarios además son bastante interactivos. No es que afecte a la jugabilidad, pero no está mal poder volar algunas estructuras que hay por los escenarios. Los personajes igual llaman la atención algo menos, ya que chocan con el diseño anime que podemos ver en la selección de personajes. El principal problema que le veo a los gráficos es el ya mencionado de que no se diferencian demasiado los proyectiles enemigos para que no se confundan en un mar de balas. La música no está mal, acompañando bien a la acción.
Conclusión
Demon’s Crystals no es un mal juego, y de hecho es un shooter de doble stick que logra divertir. Sin embargo, está lejos de ser de las mejores propuestas que hay dentro del género, pudiendo encontrar fácilmente mejores títulos tanto en PC como en consolas, donde el juego llegará próximamente. Así que, en líneas generales, estamos ante un shooter de doble stick del montón, que os divertirá si sois fans del género. El multijugador es lo que lo separa un poco en comparación con otros títulos similares, pero no es suficiente como para hacerlo destacar.
Si hubieran podido ofrecer unos diseños de armas, escenarios y enemigos más variados, otro gallo cantaría. Pero si ya habéis acribillado miles de enemigos en otros juegos y queréis uno diferente, esta propuesta no os decepcionará, pero tampoco os llegará a sorprender en ningún momento.
Nos consolamos con:
- Estilo visual muy llamativo.
- Bastante desafiante.
- Los modos multijugador.
Nos desconsolamos con:
- No llega a sorprender en nada.
- Que los potenciadores de armas sean números y no se muestre un icono.
- Los proyectiles enemigos muchas veces se pierden entre las demás balas y cuesta identificarlos.
Ficha
- Desarrollo: Byte4Games/StarCruiser Studio
- Distribución: Badland Games
- Lanzamiento: PC: 21/04/2016 - Llegará a las demás plataformas a finales de 2016
- Idioma: Español
- Precio: 9,99 €
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