
Los gachas musicales me encantan. Me han robado muchas horas muertas y hasta me llegado a enganchar a algunos, como Hatsune Miku: Colorful Stage (o ProSekai para los amigos) y Argonavis. Tenemos musicote, nuevos temas de manera constante, historias interesantes en constante expansión y normalmente, una parte rítmica muy adictiva. Pero hay un problema: muchos cierran y se acaban perdiendo. Eso si llegan siquiera a publicarse en Occidente antes de su muerte prematura. Por eso, me alegró mucho el anuncio de I*CHU: Chibi Edition.
Este grupo de idols virtuales protagonizaron un par de gachas que ya han sido discontinuados, pero también los hemos podido disfrutar en anime. Ahora, podemos descubrir su historia por estos lares gracias a la versión offline del gacha. A nivel de preservación del medio me parece una gran noticia un lanzamiento de este tipo… Pero a veces, hay que tener cuidado con lo que se desea, ya que tras las buenas intenciones de este lanzamiento, hay bastantes problemas que enmarañan de manera notable este gran concierto de regreso.
Los idols robóticos van a la escuela
En primer lugar, I*CHU: Chibi Edition se divide en dos partes muy diferenciadas. Por un lado, tenemos la historia, que es una Visual Novel donde seguiremos a los 32 idols en sus andaduras por la Étoile Vie School. Dirigida por un oso (tranquilos, este no es un asesino como Monokuma de Danganronpa), en teoría encarnaremos a la productora que ayudará a los estudiantes de primer, segundo y tercer año. Todos forman varios grupos, que son tan variopintos como atractivos.
Entre los novatos mis favoritos son ArS, formado por artistas de toda clase de ámbitos como un tímido mangaka o un artista que está como una regadera. Entre los de segundo año destaca Lancelot, los «malotes» que tienen señores temazos. Así hasta un total de 9 de grupos. Antes decía «en teoría» lo de la Productora, ya que apenas tomamos decisiones, más allá de ver en qué grupo nos centramos para ver una escena u otra.

Entre osos asesinos y directores, está claro que su lugar está en los institutos
Los «protagonistas» serían el trío de F∞F, y más concretamente, Seiya Aido. O al menos, son los que más presencia tienen a lo largo de la historia. Como tal no estamos ante una historia memorable, al ser varias historietas muy de slice of life mientras los grupos van creciendo como idols. ¿Problema? La localización al inglés de I*CHU: Chibi Edition es bastante mediocre. Hay montones de fallos de puntuación, erratas, y todos tienen una voz uniforme pese a lo variopinto de sus personalidades. Esto le quita mucha gracia a los diálogos, al parecer que casi todos son robots. Todo lo contrario a la localización del reciente B-Project, donde la manera única de hablar de cada idol era más que evidente.
Lo que sí se mantiene es el cambio en el tamaño de la fuente, lo cual me ha dado un buen TOC mientras iba jugando. A medida que va saliendo el texto, éste se va encogiendo, llegando a veces a tener una letra minúscula. En modo portátil en Switch apenas se ve, e incluso en un buen televisor cuesta leerlo en ocasiones. Ver al mismo tiempo un gran espacio en blanco por no rellenar del todo la caja de texto me ponía enfermo.

A disfrutar de los conciertos
Para poder avanzar en la historia, deberemos completar los temas que iremos desbloqueando poco a poco. Así tenemos que jugar a la parte rítmica para seguir con la parte de Visual Novel, unificando ambas secciones de I*CHU: Chibi Edition. ¿Problema? Sólo se desbloquean las historias completando las fases en «Fácil». ¿Completamos la canción en Normal o más? Mala suerte, que no sirve. Y la verdad, el «Fácil» resulta algo aburrido.
En teoría, esto era igual en el juego original, pero eso no excusa que sea una decisión de diseño tan mala. ¿Por qué no dejar desbloqueadas todas las canciones por defecto? Esto nos anima a ir a los eventos, donde podemos jugar a los eventos que se fueron publicando a lo largo de las temporadas que estuvo activo el juego. Pero sólo la parte jugable, no sus historias, con que aquí se quedan algo a medias. Y sí, también hay que ir desbloqueando los eventos al completar los que ya tenemos… Lo que supone repetir canciones a cascoporro, como haríamos en cualquier gacha.

Ay qué monos mis niños idols
Al menos, estos eventos proponen algunas reglas adicionales (como recuperar la emisión después de que nos la roben), y aquí tendremos acceso a casi todas las canciones, repartidas según la temática o el grupo protagonista de dicho evento. Con que para «sólo» jugar, mejor ir aquí en vez de a la partida rápida, donde tendremos que tirar de la historia para seguir obteniendo más temas.
En cuanto a la parte jugable como tal, no es nada que no hayamos visto en infinidad de juegos rítmicos de este estilo. Las notas van por cuatro carriles, y tendremos que estar atentos a las de pulsación individual o de mantener el botón. Podemos jugar tanto usando la pantalla táctil (igual que habríamos hecho en el móvil) o con el mando. En ambos casos, en las dificultades más altas (de Difícil en adelante), se logran mapas muy divertidos. Al combinar el musicote de I*CHU: Chibi Edition con lo divertido que es jugar, es fácil engancharse durante bastantes horas, saltando de evento en evento y de temazo en temazo.

A recuperar la grabación para que no nos quiten el protagonismo
Gachas para todos
He dicho varias veces que el juego era un gacha… Y eso se ha mantenido tal cual. Si no estáis acostumbrados a esta clase de gachas musicales, tendremos que conseguir las cartas de los personajes. Tendrán asociados diferentes tipos, y como cada canción es de un tipo, conseguiremos ventajas si creamos una composición de personajes de ese tipo. Si además vamos con un grupo completo, tendremos bonus adicionales. ¿Cómo conseguir a los personajes? ¡Mediante el sistema de gacha!
I*CHU: Chibi Edition no tiene ningún tipo de microtransacciones. En su lugar, nos darán tiradas casi con la frecuencia de los primeros compases de cualquier F2P. El problema es que las probabilidades de obtener las mejores unidades son tan bajas como en un F2P, por lo que preparaos para hacer un montón de tiradas hasta tener a nuestros personajes favoritos.
Habrá banners por varios de los eventos que iremos desbloqueando, por lo que nos toca hacer tiradas de manera constante. Luego toca ir evolucionando las que tenemos, mediante un sistema de combinación y subida de niveles que está explicado de manera muy pobre, e incluso hay mecánicas que no se llegan a explicar, como la del sistema de «despidos» y las coronas. Toda esta parte nos obliga a navegar por muchos menús, que tampoco se han tocado, por lo que la navegación mediante el mando es un auténtico horror. Y creedme, es necesario si queremos obtener buenas puntuaciones en los eventos, siendo obligatorio tener buenas cartas, como es habitual en estos gachas.

Muchos eventos y muchos idols bien monos
Imposible enamorarse de estos idols
Los problemas no cesan aquí, ya que hay muchos problemas de esta versión que nos ha llegado a Occidente. ¿La alegría que da cuando nos toca una carta especial con su animación especial? Aquí se va a la porra cuando se hace un zoom para mostrarse híper pixelada. Esto también ocurre en los primeros planos en el modo historia, lo cual es cutrísimo. Incluso al hacer zoom en una carta, se rota como si estuviéramos ante un móvil que pudiéramos poner en vertical… Pero igual eso en una tele es muy complicado.
¿Lo peor? Se han eliminado por completo las historias románticas. Pese a que veremos cómo mejora la afinidad que tenemos con las cartas al ir jugando, esa afinidad no sirve para nada, ya que no se desbloquean eventos ni absolutamente nada. Pese a que se menciona en los menús de ayuda (traducidos de manera horrible, por cierto), y su borrado es inexcusable. De esta manera, I*CHU: Chibi Edition deja de ser un otome, que era uno de los atractivos del juego.
Es más, tampoco dicen frases los personajes que ponemos como principales en el menú, haciendo que sean más sosos todavía. Al parecer, varios de estos problemas no están presentes en la versión japonesa del juego, lo que hace más absurdo que hayan aparecido todos estos recortes en la localización para Occidente, haciendo que tengamos una versión peor a todos los niveles.

Un momento, ahora giro mi tele gigante para poder ver bien la carta pixelada
Conclusión
Pese a que el resultado es lejos de lo ideal, me alegro que exista I*CHU: Chibi Edition, y hasta me encantaría que tuviéramos más versiones offline de otros gachas musicales. No sólo con su parte jugable e historia principal, sino con sus historias, eventos y demás. Vamos, lo que querían hacer aquí para preservar algunas joyas, pero bien.
Y es una lástima, porque como tal, podríamos haber estado ante un juego increíble. La música que nos ofrecen estos 32 idols es fantástica, la parte rítmica es realmente adictiva, hay contenido para parar un tren y es fácil encariñarse de los personajes gracias a sus geniales diseños… Pero luego tenemos todos los problemas técnicos, la mediocre localización al inglés, la mala adaptación a Switch de la navegación y el contenido recortado.
Si buscáis una Visual Novel de idols, la mejor alternativa es B-Project (curiosamente también publicado por PQube), ya que es mucho mejor a todos los niveles que la historia aquí presentada. ¿Buscáis un juego musical de este estilo? Pues tirad de la infinidad de gachas musicales que hay en el mercado. Ojalá nos lleguen las versiones de Switch de Bandori o Hypnosis Mic, y tanto PQube como el resto de publishers aprendan de estos errores, y tengamos en el futuro las versiones offline de estos gachas que nos merecemos.
Nos consolamos con:
- 32 idols muy variados con grandes diseños y geniales personalidades
- Un tracklist muy completo y lleno de temazos
- La parte rítmica es de lo más divertida
- La preservación de un juego que ya había desaparecido
Nos desconsolamos con:
- Localización al inglés mediocre
- La navegación por los menús con mando es horrible
- Las versiones pixeladas de los sprites y las cartas quedan cutrísimas
- Mantener las bajas probabilidades del sistema de gacha
- Perder la parte romántica, contenido y mejoras varias respecto al lanzamiento japonés
Análisis realizado gracias a un código para Nintendo Switch ofrecido por PQube.
Ficha
- Desarrollo: Liber Entertainment, OperaHouse Corporation
- Distribución: PQube Games - Meridiem Games en España
- Lanzamiento: 11/10/2024
- Idioma: Textos en Castellano y Voces en Inglés
- Precio: 29,99 €
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