Una de las sagas más influyentes de la pasada generación fue Call of Duty, y el motivo de ello es, sin duda, el primer Modern Warfare. Supuso una revolución dentro de la saga, además del momento en que se convirtió en un exitazo año tras año. Por tanto, esta sub-saga es de las más queridas dentro de toda la franquicia, con que tras varios altibajos en las propuestas de Infinity Ward, el coqueteo con el futuro (aunque seguiré defendiendo el juego a capa y espada por su campaña) en Infinite Warfare y, por parte de Treyarch, la pérdida del modo para Un Jugador en Black Ops 4, tocaba volver a lo básico.
Así que, ¿hay mejor forma de hacerlo que con una reimaginación de Modern Warfare? La verdad es que no, y desde su anuncio, las expectativas estaban por las nubes. Un nuevo motor gráfico, nuevos modos para el online muy prometedores y un legado al que respetar. ¿Podrá Call of Duty: Modern Warfare estar a la altura de semejante clásico moderno?
Adiós a Michael Bay, y hola a La Hora Más Oscura - Campaña
Como en otros años, voy a ir desgranando cada uno de los pilares que conforman Call of Duty: Modern Warfare, empezando por el modo Campaña, que es lo primero que suelo disfrutar de cada entrega de la franquicia. A nivel argumental, nos encontramos ante un reinicio en toda regla de esta sub-saga, adaptando personajes y eventos a sucesos recientes, y ofreciéndonos una nueva visión de los personajes que ya conocemos.
La trama gira en torno a un gas robado por un grupo terrorista a los rusos, justo cuando los americanos lo iban a recuperar. Así que, tocará buscar el gas con la ayuda de los rebeldes del país al que se asocia a los terroristas, que a su vez, está invadido por Rusia. Todo es un campo de minas político, ya que el más mínimo conflicto internacional podría llegar a causar una guerra a gran escala entre EEUU y Rusia.
La trama no está mal, y su apuesta por centrarse más en los personajes me ha gustado. En especial, destacan Farah y Price, y aunque Alex y otros personajes tienen su momento de gloria, son estos dos primeros los que roban sus escenas por un carisma arrollador, o un buen desarrollo en sus arcos argumentales. Ahora bien, es importante pensar en este Call of Duty: Modern Warfare como una reimaginación del original, ya que hay muchísimos momentos y personajes que nos sonarán, pero que han sido cambiados notablemente.
Esto se traduce también en el tipo de misiones que jugaremos, por lo que habrá una fase de francotirador, otra de escapar de un pueblo junto a un VIP mientras un ejército rival va a por nosotros, etc. No es algo malo per sé, y como fan, me hacía gracia pensar «ey, ¡eso me suena!», junto a lo que hace con personajes que ya conocemos. No quiero desvelar ninguna sorpresa en este frente, pero está claro que este nuevo Modern Warfare es solo el inicio para vivir más aventuras junto a estos personajes.
En cuanto a la campaña en sí mismo y su estructura, nos encontramos con un enfoque similar y a la vez diferente. Si esperabais momentos a lo Michael Bay constantes, será mejor que os preparéis, ya que ahora todo recuerda mucho más a «La Hora más Oscura», «Homeland» o «Jack Ryan» por poner ejemplos recientes. Así que, hay una mayor apuesta por el «realismo», donde no habrá explosiones a nuestro alrededor en setpieces descomunales.
Además, hay inspiraciones en hechos reales, con alguna libertad (y polémica de por medio), que hace que estemos ante la campaña más cruenta de todo Call of Duty. Dicho esto, hay misiones que son una auténtica maravilla, como una en la que asaltamos un bloque de edificio de noche, identificando y acabando con los terroristas entre los civiles. Otras fases nos permiten algo más de libertad para afrontar los objetivos, ya sea el orden en el que los acometemos o si vamos más con sigilo o con acción.
Es ahí donde más brilla la campaña, incluyendo un nivel que es bestia como él solo, y que me recordó a un momento de The Last of Us bastante. ¿Echaba de menos esos momentos tan de Michael Bay? En parte, pero tengo que reconocer que estuve enganchado durante las 5 horas que dura esta campaña. Tras su falta en Black Ops 4, agradezco mucho su regreso en Modern Warfare, y aunque la de Infinite Warfare me parece algo superior, sirve para demostrar lo importante que es para la saga tener una buena campaña que deje una muy buena impresión.
¡Los enemigos nos rodean! - Spec Ops
El siguiente pilar del que quiero hablar es el cooperativo PvE de las Spec Ops. Este modo es también muy querido en la sub-saga Modern Warfare desde su inclusión en la segunda entrega, pero esta vez, su regreso es más bien en nombre, ya que la estructura es radicalmente diferente. Para empezar, lo negativo: el modo Supervivencia y su exclusividad de un año en PS4. Me sigue pareciendo absurdo que se fragmente así el contenido y se quite un modo tan divertido y adictivo, más cuando hay juego cruzado entre absolutamente todas las plataformas.
Dicho esto, el modo Spec Ops tiene una parte buena y una parte mala. La mala es obvia desde el primer momento: no estamos ante misiones breves pero rejugables, donde la cooperación es fundamental. En su lugar, estamos ante grandes misiones en mapas bastante abiertos, donde se nos presentan una serie de objetivos. Incluso el modo que denominan «Clásico» no es más que un modo Supervivencia camuflado, pero sin tantas opciones.
Por ahora, en este modo tenemos 4 misiones, pudiendo afrontarlas como diferentes roles, que tienen sus habilidades pasivas y activas diferentes. No es algo de un Hero Shooter, sino clases de forma muy, muy ligera. Por ejemplo, el médico revive más rápido que los demás, y su habilidad activa consiste en hacer que todos se reanimen solos; por otro lado, el soldado de asalto puede hacer que los compañeros recuperen munición, etc.
Lo que no ha cambiado es la importancia del trabajo en equipo, ya que estas misiones son, sin lugar a dudas, las más difíciles de todo Call of Duty: Modern Warfare. No hay dificultad para escoger, y las misiones son bastante largas, al tener que recorrer un enorme mapa para hackear ordenadores, acabar con comandantes enemigos, etc. Es posible empezar una fase con sigilo, pero lo más normal es que entremos en un tiroteo.
La dificultad me gusta, pero por desgracia, ahora mismo es bastante artificial, necesitando algún que otro ajuste. Para empezar, los enemigos, una vez en estado de alerta, son infinitos, teniendo la sensación de que cualquier esquina es como un coche lleno de payasos. Literalmente, los soldados aparecen debajo de las piedras, por lo que una zona que había sido limpiada volverá a estar llena de enemigos en menos que canta un gallo, rodeándonos sin que podamos hacer casi nada al respecto.
Si encima aparece un Juggernaut o algún tanque, estaremos bastante fastidiados. Estos primeros son bastante esponjas de daño, lo que choca bastante con el «realismo» de todo el juego. Y no, la excusa de «es que tienen una súper armadura» no me vale demasiado, porque le podemos lanzar cuatro misilazos, que aún seguirá en pie el condenado. Si solo estuviera él, sería un reto interesante, pero al sumarle decenas de soldados infinitos, entonces su presencia frustra más que otra cosa.
Lo dicho, me gusta el modo, y siempre estoy a favor de un PvE cooperativo desafiante, pero hay que hacer varios ajustes para que la experiencia de Spec Ops sea mucho más satisfactoria. Además, solo 4 misiones se quedan cortas. Se supone encima que forman parte de una historia después de lo vivido en la campaña, pero ahora mismo sólo hay una escena de vídeo y ya. Si siguen poco a poco con esta trama, añaden misiones y hacen ajustes a la reaparición de enemigos, entonces se puede quedar esta parte de Call of Duty: Modern Warfare como una espectacular. Ahora mismo es entretenida, pero frustrante, con que aviso para los que pretendan seguir siendo los reyes del mambo al jugar con amigos.
Cuando menos es más - Multijugador PvP
Por último, tenemos lo que seguramente sea el mayor atractivo de la mayoría de usuarios: el PvP. En este sentido, Call of Duty: Modern Warfare viene con modalidades y opciones como parar un tren. A los modos tradicionales se suman dos, que apuestan por formas de disfrutar del juego radicalmente diferentes.
Primero quiero hablar de Tiroteo, porque me parece un modo brillante, y la mejor incorporación de esta entrega. Básicamente, son duelos de 2vs2 muy rápidos, en los que todos los jugadores cuentan con el mismo equipo, que cambia de forma aleatoria cada dos rondas. No podemos regenerar vida ni reaparecer, con que las rondas son muy, muy rápidas e intensas. Aquí no cuenta nada el equipo, los accesorios que le hayamos puesto tras horas de progresión ni nada. Habilidad y comunicación con nuestro compañero son las mejores herramientas para alzarnos con la victoria, y aquí es donde se demuestra que, a veces, menos es más.
La otra gran novedad es Guerra Terrestre, que pasa de ser Dominación para 18 jugadores, a ser básicamente una partida de Battlefield, pero con las normas de un Call of Duty. Así que, aquí tendremos duelos de equipos de 32 jugadores, en una lucha encarnizada para hacernos con los 5 puntos de control. Sobre el papel, tener un modo a gran escala suena de lujo, ya que incluso hay varios vehículos (quads, tanques y helicópteros), lo que unido a las rachas de bajas, dan lugar a partidas bastante espectaculares. Desde luego, el ritmo es mucho más rápido que en Battlefield, ya que apenas tardaremos en entrar a la acción, ya sea por reaparecer junto a compañeros de escuadrón, o en los propios puntos de control.
El «problema» es que, ahora mismo, estas partidas son un mar de minas Claymore, de modo que corremos un poco, y «¡bum, se convirtió en Chocapic!». Se pueden vivir momentos muy divertidos, pero al igual que ocurre en el modo Spec Ops, se necesitan varios ajustes para hacer de las partidas más disfrutables.
De hecho, desde el lanzamiento ha habido varios ajustes a los puntos de reaparición de los modos más tradicionales, y la experiencia es ahora más satisfactoria que a finales de octubre. El problema en los modos tradicionales de Call of Duty: Modern Warfare es que los mapas, como tal, no son gran cosa. Hay una buena cantidad, y desde hace nada hay otros dos nuevos, pero no hay ninguno que se nos grabe a fuego en la mente como en otras entregas, y mucho menos como ocurría en el juego original. Esto es algo fundamental, ya que determina gran parte de la diversión del multijugador, y aunque los niveles son funcionales, hay margen de mejora.
Donde el juego sí funciona muy bien en estos momentos es en la progresión. No hay ningún tipo de cajas de loot, ni en principio las habrá. Hay desafíos diarios, desafíos de grupos en concreto y demás, para que podamos ir subiendo de rango y conseguir recompensas estéticas. Además, las armas van subiendo de rango, para poder desbloquear más y más accesorios a usar. La personalización de las armas es muy completa (la que más en toda la saga), pudiendo colocar todo tipo de accesorios hasta llenar las ranuras disponibles.
Otro aspecto genial de este Call of Duty: Modern Warfare es el juego cruzado entre todas las plataformas. En el Lobby, veremos quién juega en consola y quién en PC, pudiendo activarlo o desactivarlo desde las opciones. Esto no hace más que incrementar el nº de usuarios con el que jugar, con siempre es bien recibido.
En preparación para la nueva generación - Apartado técnico
La saga Call of Duty llevaba años sin acercarse a la competencia en material gráfico, pero eso cambia a lo grande con Modern Warfare. El motor gráfico creado desde cero para Infinity Ward es el mayor salto técnico que ha dado la saga en muchísimo tiempo, y se nota en absolutamente todo. Para empezar, el fotorrealismo que se alcanza en muchos momentos es para quedarse con la boca abierta.
Esto lo comprobaremos sobre todo en la campaña, en fases como la de asaltar el bloque de edificios durante la noche usando gafas de visión nocturas, o unas cinemáticas que transicionan perfectamente entre el vídeo hacia la jugabilidad. Uno de los principales motivos de esta gran mejoría está en la iluminación, que es soberbia. Los destellos, efectos de los focos y demás son geniales, junto a unas animaciones de gran calidad para todos los personajes y las armas.
En este sentido, se nota que Call of Duty se está preparando de la mejor manera para la próxima generación, con un motor mucho más potente que antes, y que si ya logra impresionar en las plataformas actuales a 60 FPS muy constantes (en la versión de PS4 Pro, al menos), no quiero pensar qué nos encontraremos en PS5 y Scarlet a partir del año que viene.
El sonido es también excelente, con unos efectos de sonido para quitarse el sombrero, al notar diferencias entre disparar al aire libre o en un entorno cerrado, por ejemplo. El doblaje en castellano también destaca, con grandes actuaciones por parte de todos los actores de doblaje… Excepto de Najwa Nimri. Es la famosa de turno presente en Call of Duty: Modern Warfare, y cada vez que habla su personaje, el resultado es espantoso.
Conclusión
Soy muy fan de Call of Duty, y con Modern Warfare, los chicos de Infinity Ward han sabido dar un buen paso hacia delante para la franquicia en general. La forma de ofrecer algo más realista, pero a la vez mantener la esencia de la saga, es genial, algo que se ve reflejado en una campaña espectacular y unos modos multijugador muy divertidos.
¿Es perfecto? Para nada, ya que el diseño de los mapas PvP deja algo que desear, y se necesitan hacer ajustes tanto en Spec Ops como en PvP a diferentes parámetros. Sin embargo, hay mucho contenido de calidad para estar pegados al mando durante horas y horas, jugando con nuestros amigos de cualquier plataforma, y disfrutando de un reinicio muy bueno de una sub-saga ya mítica del mundo de los videojuegos.
Puede que no tenga tanto impacto como lo tuvo el original, pero Call of Duty: Modern Warfare se corona como uno de los mejores shooters de este año, y todo un imprescindible para los amantes de la franquicia.
Nos consolamos con:
- Gran campaña con algunos momentos intensos a más no poder
- Técnicamente espectacular. Por fin un Call of Duty que sorprende para bien en lo gráfico
- Muchísimo contenido para estar pegando tiros durante mucho tiempo
- El modo Tiroteo. La mejor adición posible para el PvP
Nos desconsolamos con:
- El diseño de los mapas del PvP deja algo que desear
- Se necesitan ajustes para que Spec Ops no sea frustrante ni injusto en su dificultad
- Claymores por todos lados. Más ajustes necesarios en diferentes aspectos del PvP
- El doblaje de Najwa Nimri
Ficha
- Desarrollo: Infinity Ward
- Distribución: Activision
- Lanzamiento: ?
- Idioma: Textos y Voces en Castellano
- Precio: 69,99 €
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