La mayoría de los usuarios de PSVR tiene VR Worlds, y la parte que más sorprende a muchos (junto a la del tiburón) es sin duda London Heist. Básicamente teníamos una mini-película de gángsters de media hora, con unos gráficos de gran calidad, escenarios muy interactivos, y un par de secciones de tiroteos de lo más inmersivos al tener que coger los cargadores y meterlos físicamente en el arma. Sin embargo, no pasaba de una demo técnica más larga de lo normal, ya que siempre estábamos en el mismo sitio, y al final, todo era una sucesión de oleadas.
Por este motivo, uno de los mejores anuncios del año pasado para los usuarios de la plataforma fue Blood & Truth, en el que London Studios ofrecería un juego entero basado en dicha experiencia. Gracias al evento organizado por Sony para ver la conferencia de Playstation del E3, he podido probar la demo que estará presente en Los Ángeles, y el hype está más que justificado, ya que estamos ante London Heist en esteroides.
Por desgracia, solo pude probar la versión corta de la demo, pero la duración era bastante buena, ya que duraba unos 10-15 minutos. La demo empieza con un tutorial, algo esencial para hacernos con los controles. En esencia, nos moveremos por el escenario a partir de puntos predeterminados y con el botón Move, como en Bravo Team. Por suerte, el movimiento está mucho mejor resuelto aquí, ya que siempre estamos en primera persona, los pasos que se dan son muy naturales, y así nos podemos centrar en la acción, que es constante. Otro detalle que me gustó es que, si hay coberturas posibles a nuestra derecha o izquierda, podemos pulsar el botón «X» ó «Círculo» para hacer un movimiento lateral, sin de nuevo, perder de vista la acción, algo que funciona a las mil maravillas.
Al igual que en Arizona Sunshine o Killing Floor, el inventario es nuestro cuerpo, por lo que tendremos que acercar las manos a las cartucheras para acceder a nuestras pistolas, o a la espalda para el arma pesada. Las armas se tienen que recargar manualmente, teniendo que coger los cargadores de nuestro pecho, manteniendo así ese genial toque inmersivo de London Heist.
Tras el tutorial, pasamos ya al juego, con un nivel que no se había visto hasta la fecha, teniendo lugar en una zona urbana con muchos elementos en obras. No sé muy bien el contexto argumental, ya que al ser el evento en una discoteca, apenas escuchaba los disparos, que es lo esencial para saber cuándo nos están cosiendo a balazos, con que los diálogos eran un pequeño ruido de fondo más que otra cosa.
El ritmo de la demo es muy frenético, con tiroteos constantes contra montones de enemigos. El sistema de movimiento es fantástico para no salirnos de la acción, funcionando especialmente bien el movimiento lateral. Hubo un momento en el que tenía un coche a mi derecha, con que pude moverme hacia allí mientras seguía disparando hacia delante, llegar al coche, usar mi mano libre para abrir la puerta, y así tener una nueva cobertura desde la que disparar. Blood & Truth es muy peliculero, algo que se refuerza con coberturas destructibles, lo que también nos obliga a movernos constantemente, o en su defecto, tener muy buena puntería. Originalmente hubiera preferido movimiento totalmente libre, pero dada la falta de sticks en los Move, me parece una solución genial para en todo momento tener las manos disponibles para disparar o interactuar con el escenario.
La demo ofrece tiroteos constantes, y los enemigos no se andan con chiquitas. Hay un enemigo que lleva una escopeta y armadura pesada, por lo que es un rival muy poderoso al que derribar lo antes posible. Los guardas normales también tienen su miga, al poder usar granadas. Hubo un momento en el que estaba cubierto y agachado porque estaba rodeado, así que disparaba literalmente a ciegas por encima de la cobertura. Entonces, vi una granada que caía casi a mis pies, por lo que la cogí, la lancé y me cargué con esta granada a dos enemigos, activando así la cámara lenta (también se puede activar en cualquier momento), gracias a la cual me cargué a otros dos guardas. La inmersión y el espectáculo están a la orden del día en Blood & Truth, y ciertamente te sientes como el héroe de una película de acción.
Algo que me gustó mucho es que cuando solo tenemos una pistola, es muy recomendable usar la mano libre para sujetar también la pistola. De este modo, el retroceso es mucho menor, como ocurriría en la realidad. Pero claro, también es muy divertido usar dos pistolas a la vez, y para ello hay que explorar los escenarios en busca de cajas de armas. Al tener dos armas, la recarga sigue siendo manual, pero ahora, si acercamos la mano a nuestro pecho, cogeremos un cargador sin soltar la pistola, lo que mantiene la inmersión que comentaba antes a la hora de recargar, pero con lo poderoso que se siente uno al llevar dos armas a la vez. Incluso pude usar una metralleta en una mano y una pistola en la otra en la zona final, para acabar con una gran explosión que destrozaba un andamio lleno de guardas, mostrando un «Continuará».
Para apoyar esta inmersión, tenemos unos gráficos sencillamente fantásticos. Todos los escenarios lucen genial, mostrando una gran nitidez, al mismo tiempo que la calidad es equivalente a la vista en London Heist, pero siendo todo mucho más grande y dinámico que en dicho juego. Los enemigos también se mueven genial, con grandes animaciones, algo que también ocurre cuando les disparamos, al ver cómo reaccionan en función del lugar de impacto, y poder ver marcas de sangre donde les hemos dado.
Todavía no sé de qué va la historia, y la duración es una incógnita, pero esta toma de contacto con Blood & Truth ha sido insuperable. A nivel de inmersión, parece que estamos ante el equivalente de Farpoint con los Move, pero además aquí te sientes más como el James Bond de turno, eliminando enemigos, usando coberturas y creyendo que eres un héroe de acción en todo momento. Puede que no tengamos fecha de lanzamiento (el desarrollador sólo me dijo que saldría «pronto»), pero para los usuarios de PSVR, Blood & Truth tiene todas las papeletas para ser uno de los mejores juegos de este año.
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