La saga Battlefield siempre se ha caracterizado por ser “la gran alternativa”. Ya hace cerca de 10 años que apareció Battlefield 1942, ambientado en la II Guerra Mundial, con el fin de plantar cara al, por aquel entonces, todopoderoso Medal of Honor y su grandioso Allied Assault. El éxito fue tal que catapultó al éxito a una desarrolladora sueca que, hasta esa fecha, solo era conocida por sus juegos de Pinball, Digital Illusions Creative Entertainment (DICE), empresa que en 2004 fue comprada por EA. Battlefield 2 tuvo que lidiar con un peso pesado todavía peor, Call of Duty, una batalla que mantienen hasta la actualidad.
Cada Battlefield nuevo ha ido ganando más terreno en el género bélico hasta conseguir con el pasado Bad Company 2 uno de sus mayores éxitos. Debido a ello esta tercera entrega ha venido bien cargada de hype y unas expectativas por las nubes, en parte a causa de las ganas de destronar a la, hasta ahora, intocable franquicia de Activision. ¿Lo habrá conseguido?