La saga Persona ha ido creciendo en popularidad en los últimos años, lo que ha llevado a multitud de spin-offs más allá de los juegos principales. Este boom pasó sobre todo con la cuarta entrega, de la cual surgieron varios juegos de lucha bien recibidos, y hasta un juego musical en la forma de Persona 4: Dancing All Night. Tras una quinta parte sencillamente maravillosa (sigue siendo mi GOTY de 2017), es el turno de volver a los spin-offs, y esta vez por partida doble.
Como el juego musical de la cuarta parte tuvo mucho más éxito del que se esperaban en ATLUS (era muy, muy bueno), es el momento de volver a explotar el gran apartado musical de la franquicia con Persona Dancing: Endless Night, el pack de los dos últimos lanzamientos de la saga de spin-offs musicales: Persona 3: Dancing in Moonlight y Persona 5: Dancing in Starlight. Como ambos juegos funcionan de manera prácticamente idéntica, he decidido hacer el análisis de ambos títulos juntos en esta gran colección, que incluso trae consigo Persona 4: Dancing All Night para PS4. ¿Listos para volver a la pista de baile con algunos personajes sencillamente maravillosos?