Soy un gran fan de Kinect. De hecho, fue el motivo por el que me compré una Xbox 360, y en gran parte gracias a Dance Central. Por eso esperaba como agua de mayo que Harmonix diera el salto a la nueva generación. Al fin ha llegado dicho momento gracias a Dance Central Spotlight, que por desgracia, no viene en forma de juego completo, sino como uno digital. Esto abre una nueva vía de mercado para la saga, ya que nos ofrece un contenido limitado, para que sea el propio usuario el que cree su propia librería de música a través de DLC.
Todo mientras seguimos disfrutando de la gran experiencia de baile que disfrutamos en Xbox 360. Sin duda, es un objetivo muy interesante, pero la pregunta del millón es ¿nos harán bailar sin parar como antes o este pequeño paquete ha perjudicado la experiencia?