La saga Prince of Persia ha estado unos años de capa caída. Ubisoft no quería hacer nada con ella, y por fin está volviendo en forma de metroidvanias, rogue-lites o un remake que parecía más olvidado que las Arenas del Tiempo. Sin embargo, hay un medio donde la franquicia no tiene puestos sus ojos: la VR. Pero ahí está Virtual Age para remediarlo, ya que tras probar Ember Souls, está claro que va a ser el Prince of Persia VR que los fans de la franquicia estábamos deseando.
Ya el trailer de presentación de hace unos meses lo auguraba, pero tras probar una demo durante Gamescom, la inspiración es más que evidente. ¡Y me encanta! En todo momento no paraba de pensar «esto es igual que Prince of Persia», pero con la diferencia de que ahora era yo quien estaba haciendo el parkour, peleando y usando toda clase de poderes místicos.
El malvado sultán vuelve a hacer de las suyas
La demostración era un conjunto de secciones pensadas para hacerse una idea general de qué esperar del título, con que a nivel argumental todavía queda mucho por descubrir. Por lo que me comentaron desde el estudio, la trama será un elemento importante de la aventura, partiendo de la típica premisa «el sultán es el malo y quiere destruir al reino», pero ofreciendo varios matices para atraparnos en el proceso.
El primer elemento que justo engancha es el de nuestro alado amigo Alshain, un águila espiritual que es quien nos encomienda nuestra misión de salvar el reino. Se le puede acariciar como en Falcon Age, reaccionando perfectamente a nuestros movimientos para que nos tiremos un buen rato jugueteando con él. También se le podrá invocar una vez ya entrados en faena para que nos dé pistas, posándose en nuestra muñeca como si fuéramos unos expertos en cetrería.
Águilas espirituales aparte, en Ember Souls vamos a encontrarnos una buena combinación de combates, plataformeo y resolución de puzzles, para así ofrecer una aventura de lo más variada. En lo referente a los rompecabezas, esta demo solo ofrecía uno muy sencillito, pero para reposar un poco tras sortear unas mortales trampas o enfrentarnos a otro grupo de enemigos, funciona a las mil maravillas.
¿Alguien ha dicho parkour?
La parte que más me enamoró de Ember Souls es de lejos todo lo relacionado con el plataformeo. ¿Todos los movimientos que puede realizar el Príncipe? Pues también los haremos nosotros, ya sea correr por las paredes, descender rasgando preciosos tapices, escalar o saltar de una barandilla a otra.
Todo funciona realmente bien, aprovechando la fisicidad de la VR para hacernos partícipes de esta fantasía de parkour como nunca antes un Prince of Persia lo había logrado. Además, hay cierto margen para el speedrunning o presumir de habilidades, al poder impulsarnos para superar secciones de escalada antes, o desactivar la cámara lenta para cuando saltamos de una viga a otra y así agarrarnos en tiempo real sin ningún tipo de ayuda. ¿Necesitamos ir con más calma? Pues ahí estarán las opciones, para que así todos puedan sentirse el Príncipe, tengamos más o menos habilidad con estas mecánicas de escalada/plataformeo propias de la VR.
Pero la cosa no se quedará en nuestras habilidades fisicas. A lo largo de la aventura iremos obteniendo poderes elementales, que nos darán nuevas habilidades para el plataformeo, el combate o ambos. Un ejemplo que pusieron fue poder congelar el agua con el poder de dicho elemento, algo que se usará para secciones de parkour inspiradas en el infravalorado Las Arenas Olvidades. En el caso de la demo, teníamos el poder del viento… ¡Que nos da un gancho! Con él podemos incluso «saltarnos» más secciones de escalada o plataformas si somos hábiles, funcionando a las mil maravillas y dando una increíble satisfacción cuando superamos unos cuantos abismos que conducían a una muerte segura.
La espada es para usarse y no para presumir
El tercer pilar de Ember Souls es, como os habréis imaginado, el combate… Y por ahora es donde el equipo tiene más cosas que pulir. Tenemos las ideas ya básicas en el género, como un uso de las físicas para simular los impactos, y así obligarnos a hacer bloqueos, parries o buscar la abertura en la defensa de nuestros oponentes. Incluso podemos lanzar dagas con sigilo desde lejos, con un generoso auto-apuntado para que nos sintamos como unos grandes héroes.
¿El problema? Todavía no se siente del todo bien al golpear o bloquear. Le falta pegada a las armas y las reacciones de los enemigos no son del todo naturales. También me falla que al luchar contra esqueletos, al golpearles les salga sangre… ¡son esqueletos! Esto es una manía personal, pero prefiero partículas de polvo antes que ver sangre cuando no debería de existir. El equipo de Virtual Age es consciente de todo esto, y están justo en el proceso de hacer los ajustes necesarios para que el combate sea más divertido.
Al menos, hay un aspecto donde funciona de maravilla: ¡la magia! El poder del viento nos permite hacer el equivalente a un empujón de la Fuerza, siendo increíblemente satisfactorio lanzar a los enemigos por los aires con un simple gesto de muñeca.
Una aventura persa con mucho potencial
Aún queda mucho por ver de Ember Souls, como los épicos jefes finales a los que nos enfrentaremos, el resto de poderes o incluso el modo rogue-like más centrado en el parkour. El equipo de Virtual Age tiene entre manos una verdadera joya que vamos a gozar una barbaridad los que echamos de menos las aventuras al estilo de Prince of Persia, y encima siendo nosotros el Príncipe haciendo las cabriolas y luchando contra los monstruos.
Por ahora no hay fecha de lanzamiento, pero si todo va bien, disfrutaremos de Ember Souls en Meta Quest y Steam VR a lo largo de este próximo otoño.
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