
Double Fine es uno de los estudios más únicos de la industria. En cada proyecto intentan hacer algo nuevo, y Keeper no es una excepción. Es fácilmente de los juegos más extraños y sorprendentes que he visto en toda la Gamescom 2025. De la mano de Tim Schafer, pudimos ver tres secciones muy diferentes que dejan claro que Keeper no va a ser sólo una cara bonita, sino que tiene mucho que contar.
¿El origen del proyecto? Curiosamente la pandemia. El director del título, Lee Petty tuvo la suerte de vivir aislado en la naturaleza, pudiendo dar paseos tranquilos sin ver a nadie durante días por el confinamiento. Así surgió una pregunta muy clara: ¿cómo sería el mundo si no hubiera humanos? Al no tener que preocuparse por el tema de la financiación o búsqueda de publisher tras ser comprados por Microsoft, pudieron emprender este proyecto, con la meta de ofrecer una extraña y relajante experiencia.
Un viaje de transformación
Una de las grandes inspiraciones para Keeper fue la obra de Salvador Dalí. Cómo mostrar la naturaleza pero algo distorsionada, para que cuando veamos algo familiar, al mismo tiempo, nos resulte tan desconcertante como atrayente. En un mundo en el que los humanos han desaparecido desde hace mucho tiempo, la naturaleza y el mundo han cambiado.
Nosotros tomaremos el papel de un faro, que tras posarse una especie de gaviota verde gigantesca, cobra vida. Así juntos vivirán una gran aventura, mientras exploran el mundo y van en busca de una «presencia». Toda la narrativa será completamente visual, ya que al no haber humanos, tampoco hay palabras. Así que por el arte y la música, iremos descubriendo este viaje de transformación, con obviamente, mucho margen para la interpretación de cada uno.
¿Cómo se traslada esto en material jugable? Ofreciendo secciones más de exploración y de rompecabezas. En la primera que nos enseñaron, estábamos en un frondoso bosque, interaccionando con lo que nos rodea al activar la luz. Es la manera de modificar el mundo, afectando con la luz a lo que nos rodea, o mandando a nuestro aviar amigo para activar diversos mecanismos o recoger objetos. En esta primera ocasión, todo era muy onírico y relajante, acabando el viaje colocando una perla gigante en un árbol que cobraba vida, pudiendo ver de esta manera la transformación de la naturaleza frente a la ausencia de los humanos.
En nuestro viaje acabaremos con la oscura presencia que asola este precioso mundo
Manipulando el espacio y el tiempo
Otras fases estarán enfocadas en los rompecabezas. En el segundo nivel que nos enseñaron, visitábamos una ciudad, pero en vez de humanos, había una especie de robots. Por esa presencia que está afectando al mundo, el tiempo no está funcionando correctamente. Así que al avanzar o retroceder el reloj de la plaza del pueblo, el tiempo se modificará para poder resolver los problemas de este adorable pueblecito.
Visualmente todo resulta muy llamativo, viendo cómo, al ir al pasado, la gaviota se convierte en huevo, o edificios que se habían destruido vuelven a estar completos. Todo es un regalo para los sentidos, teniendo Keeper una personalidad arrolladora que invita a perdernos por su extraño mundo y descubrir cómo acaba funcionando todo.
Lo mismo ocurre en la tercera secuencia, donde el puzzle no es tanto de interacciones con el mundo, sino que se basa en la exploración. Estamos en una zona con una vegetación frondosa y preciosa a más no poder, pero que se pega al faro. Estas plantas manipulan la gravedad, por lo que la manera de explorar el entorno cambia radicalmente. Es la manera del estudio de mostrar la metamorfosis que sufre la naturaleza y el mundo, con las cosas pequeñas (como estas pequeñas flores) afectando a lo gigantesco (nuestro faro).
Unas pequeñas plantitas pegajosas podrán afectar a nuestro gigantesco faro
Una luz que ilumina nuestro camino
«En Double Fine nos gusta hacer juegos raros» decía Tim Schafer al inicio de la presentación, y tras ver más de este Keeper, esa idea se sigue manteniendo. No hay ningún otro juego como Keeper en el horizonte, y su luz es una guía para demostrar que en la industria seguimos necesitando juegos así. Únicos, que intenten algo nuevo y que no por ello dejen de ser atrayentes.
Keeper ya tenía mi interés tras su tráiler de presentación, pero viendo más en detalle lo que nos espera en este extraño y relajante viaje, me tiene totalmente cautivado. Lo bueno es que no tendremos que esperar demasiado para seguir la luz de este faro, ya que el juego estará disponible 17 de octubre en Xbox Series X/S y PC.