Desconsolados

Dear Esther

Querida Esther: me alegra saber que el día que Dear Esther salió en Steam, a las seis horas ya se habían cubierto los gastos de producción del juego y empezaba a generar beneficios. Algo que me enorgullece debido a la naturaleza de este título indie experimental, una especie de novela visual que me hace recordar una de aquellas historias de miedo que se cuentan junto al fuego. Un viaje cargado de simbolismos que polarizará aquellos que lo jueguen, dividiéndolos entre los que lo aman y los que lo odian por no haber entendido nada.

Dear Esther es la versión comercial de un mod para Half Life creado en el 2008 por Dan Pinchbeck de thechineseroom. Un exempleado de DICE, Robert Briscoe, decidió hacer un remake del juego, con el soporte de Pinchbeck y financiado por la Indie Fund, cuyo título es el que tenemos hoy en día.

En Dear Esther, nos ponen en primera persona en las vivencias de un hombre perdido en una isla desierta, cuyas memorias le torturan en su soledad. Nuestra única opción es seguir avanzando, a ver que es lo que nos depara el camino. Una fuerza por saber más, por intentar entender, nos hará seguir avanzando.

La isla en la que nos encontramos vivió tiempos mejores. Siguiendo el camino, veremos un montón de elementos simbólicos que complementan la historia, resolviendo algunos aspectos y haciendo que nos hagamos nuevas preguntas.

Los cinéfilos se reúnen a menudo en cineforums para comentar las películas. Dear Esther es un título experimental que se beneficiaría de un espacio así, ya que al terminar el juego uno tiene casi más preguntas que con las que empieza, cosa que motiva a empezar de nuevo y descubrir nuevos detalles. Incluso tras una segunda vez, muchas cosas quedan sin resolver y es posible encontrar múltiples explicaciones. Es un juego que da mucho para comentar.

A su vez, este título solo confundirá aquellos que buscan acción directa y recompensa inmediata. Dear Esther no es un Skyrim ni nada por el estilo. Nuestras acciones se limitan a caminar, a ir siguiendo un camino que está más o menos marcado. Es prácticamente una novela de miedo en la que tenemos algo de libertad sobre cuando avanzar.

Todo esto viene acompañado de un gran entorno visual. Una isla que cobra vida ante nuestros pies, inspirando abandono y desolación. Los cielos grises y la oscuridad nos acompañarán, para acojonarnos un poco más, junto con la gran narración de Nigel Carrington para la versión inglesa, y el fantasmagórico acompañamiento musical a mano de la compositora Jessica Curry.

Por ahora, la versión inglesa es la única disponible, pero se encuentran ultimando una versión en español.

Conclusión

Dear Esther es un juego difícil de analizar, pues más que un juego es un experimento para crear una novela interactiva, algo radicalmente diferente a lo que estamos acostumbrados. Tampoco quiero extenderme, para no revelar ningún spoiler, pues es un juego que se disfruta más si no sabes nada de él. Aquellos que esperen carcajadas, acción o recompensa inmediata que miren para otro lado, pero para los que busquen una gran experiencia introspectiva, triste y meláncolica, Dear Esther os encantará. Si eres de los que gustan las historias de miedo y tienes una mente abierta, no lo dudes ni un momento. Y luego lo comentamos en un «juegoforum».

Lo mejor:

Lo peor:

Ficha

Salir de la versión móvil