Hay juegos que esperas como agua de mayo, y una primera toma de contacto hace parecer que todo va a salir bien. Esto ocurrió con Project Wingman: Frontline 59, el esperadísimo lanzamiento de Project Wingman en PS5. Al fin y al cabo, se cumplía todo lo que esperábamos, e incluso más: una nueva campaña exclusiva y soporte para PS VR2. Encima aprovechando las funciones del visor, con que todo sonaba de maravilla.
Al salir a la venta, nos llevamos un golpe de realidad al ver que la compatibilidad con PS VR2 era limitada, en vez de usarse para disfrutarse de todo el juego como en PCVR. Pero quitando este chasco, ¿cómo ha salido esta versión del juego? Hora de volver a ponerse el casco, que las batallas aéreas más espectaculares a este lado de Ace Combat no han hecho más que comenzar.
Alerta de drama: ¡Magadán ha sido invadida!
Voy a empezar por precisamente el nuevo contenido, por ahora exclusivo de esta versión. Frontline 59 no son misiones sueltas y ya. Estamos ante una nueva campaña compuesta por 6 misiones, que tienen lugar de manera paralela a la historia principal. En su intento de expansión, Cascadia se ha propuesto invadir el país de Magadán. Hasta que lleguen los refuerzos de la Federación le tocará a la unidad de pilotos reservistas mantener el fuerte, y si todo va bien, incluso echar a los invasores.
Como en la historia principal y en cualquier Ace Combat, os podéis imaginar que hay mucho conflicto bélico entre países ficticios, pilotos que cambian el curso de la guerra y drama. Muchísimo DRAMA. Tanto como para mantenernos en vilo no sólo por los combates aéreos sino por los diálogos entre los personajes durante las misiones.
De nuevo, no estamos ante el argumento más brillante del mundo, pero nos va dando buenas excusas para saltar de una misión a otra. En el papel del piloto Chófer resultaremos ser la pieza clave que Magadán necesitaba para echar a los invasores, convirtiéndonos en el proceso en el mejor piloto del país. ¡Nada mal para un reservista que no había visto un combate en su vida! No hay ningún detalle que sea memorable, pero sí hay escenas y eventos que se grabarán a fuego en nuestro cerebro. Lo mismo que en la historia principal de Project Wingman, pero de una manera mucho más compacta. Todo para que llegue a su fin en apenas 3 horas de adrenalina máxima.
Una campaña pequeña pero matona
La primera de las nuevas misiones es quizá la más simple de todas, al ser unos combates aéreos en un entorno bastante despejado. Pero aun así, acaba con fuerza, al tener ya un mini-jefe final bastante divertido. Vamos, la re-introducción perfecta por si venimos del original, al que ya jugamos hace unos añitos.
Después no para de tirarnos alguna sorpresa en cada fase. Tan pronto estamos peleando en mitad de una tormenta, como protegiendo a un bombardero en pleno campo de molinos eólicos. Eso por no mencionar el paso a toda velocidad por los túneles de una montaña para pillar desprevenidos a los enemigos, o cómo no, el combate final, que es sencillamente brillante.
Frontline 59 tiene todo lo que hace bueno a Project Wingman, pero condensado al máximo para ofrecernos más emociones fuertes sin un sólo momento de respiro. Eso sí, también tiene algunos de sus puntos «negativos», o que pueden causar frustración, como la ausencia de puntos de control. Algunas fases son bastante largas, con que morir justo al final puede querer hacernos lanzar el casco de piloto contra la cabina. Forma parte del diseño del juego, para obligarnos siempre a ir con cuidado, pero ciertamente, alguna dificultad con checkpoints no le haría ningún daño, ya sea en esta campaña o en la principal.
El combate final es la definición perfecta de épico
El simulador de Top Gun perfecto – Modo PS VR2
Si la campaña original la disfruté en Realidad Virtual en PC, esta nueva campaña no iba a ser menos. Es el único contenido compatible del juego con PS VR2. Es una pena, ya que es absurdo el tener todo el juego para PCVR, pero sólo esta pequeña parte para PS VR2. Por temas de potencia, como ocurría con Ace Combat 7, no es. Ya os digo que las misiones de Frontline 59 son igual de complejas que las principales, con que es una limitación bastante estúpida.
Dicho esto, Project Wingman se disfruta una barbaridad en Realidad Virtual. Vivimos la fantasía de ser pilotos de caza como en Top Gun, y la inmersión es total. Vale que hay muchos aspectos que siguen siendo mejorables, como el no soporte para HOTAS, que nuestro avatar no mueva la palanca de los aviones y demás. Pero estar en la cabina de cada uno de los cazas disponibles, esquivando misiles, explosiones y demás sencillamente no tiene precio.
Hay cierto recorte gráfico al jugar así, ya que por ejemplo, las nubes se ven mal. Se pierde el efecto de gotas que chocan contra la cabina, además de estar muy pixeladas. Seguramente por el uso de reproyección. También el suelo no está muy detallado, habiendo popping evidente de la vegetación. Aun así, estos defectos no me han importado lo más mínimo. La imagen es bastante nítida, con que podemos ver lo más importante del juego: los demás aviones. Las misiones son increíblemente intensas, ya que cuando estamos girando sin parar, la diversión está por las nubes (¡ja!) desde el primer momento hasta el último.
A esto hay que sumar el uso de las características propias de PS VR2. Cambiar de objetivo con el tracking de ojos no sólo es muy preciso, sino que hace todo mucho más ágil e inmersivo. Ya no dependemos del cambio automático de blanco, lo que nos da un mayor control sin por ello añadir complejidad extra. La vibración del casco al tener una explosión cerca nos mete más de lleno aún en la acción. Y creedme, cuando vamos a toda pastilla, aparecen rayos en mitad de la tormenta o vemos los rayos de las torretas enemigas a nuestro alrededor, es imposible no tener un chute de adrenalina. Porque ahí está la magia de jugar en VR a Project Wingman: nos convertimos en pilotos, en vez de controla a uno. Sólo son 3 horas esta campaña, pero creo que incluso si sólo os interesa la parte VR, merece la pena el juego. Es así de bueno Frontline 59.
Contenido de altos vuelos
Esto nos deja con el resto del juego, y aquí no voy a entrar mucho en detalles. En su lugar, os animo a leer el análisis que hice en su momento de la versión de PC. Desde entonces se han pulido varias cosas, pero las sensaciones generales siguen siendo la misma. La campaña de Project Wingman es una auténtica maravilla. Son más de 20 misiones que no paran de ir a más, ofreciéndonos un drama bélico con mucho énfasis en la parte de «drama». Hay escenas y combates que son de lo mejor que nos ha dado el género.
A nivel general quizá esta campaña está solo unos peldaños por debajo de Ace Combat 7, pero claro, hablamos de un AAA donde ya han perfeccionado la fórmula durante años. Lo que ha conseguido Sector D2 es sencillamente increíble. La sensación arcade al jugar es fantástica, ya que a efectos prácticos, parece que estamos ante un Ace Combat, pero sin llamarse como tal. El mejor cumplido para un proyecto que empezó por hacer un juego de la saga cuando la franquicia parecía muerta.
Si la extensa campaña os deja con ganas de más, entonces está el Modo Conquista. Es básicamente un modo rogue-like donde vamos ganando recursos al completar misiones, y así podemos comprar aviones o contratar aliados. Otra muestra de un diseño muy bien pensado para que estemos horas y horas simplemente combatiendo de lo bien que funcionan las mecánicas jugables.
Ir con un jet por dentro de unos túneles es tan intenso como parece
La música de los aviones
Pasando al apartado técnico, Project Wingman: Frontline 59 se ve en PS5 igual de bien que en PC. Esto se traduce en unos aviones muy detallados, una iluminación muy conseguida y efectos climatológicos espectaculares. Me sigue pareciendo genial la manera en la que en una misión, al atravesar las nubes, podemos pasar de una tormenta increíble a estar completamente despejado. Eso por no hablar de las explosiones, rayos láser, la amplitud de los escenarios y mucho más.
Donde el juego brilla a lo grande es con su banda sonora. Jose Pavli hace la música y es increíble. Ya sea en la campaña principal, o con los nuevos temas para Frontline 59. Añade muchísimo a la experiencia, con unas canciones épicas, súper activas o una mezcla de ambas. Cuando encima estás en VR en mitad de un combate increíble, es imposible no venirte arriba.
A esto sumad el gran trabajo de los actores de voz para venderte el DRAMA de la historia. Sí, son voces en inglés, con que toca leer subtítulos en mitad de los combates… Lo cual sigue siendo un problema, las cosas como son.
Conclusión
Project Wingman ya me pareció un juego increíble hace años, y lo sigue siendo. Una declaración de amor a Ace Combat que logra clavar su esencia, para básicamente, darnos una secuela pseudo-oficial, que se parece en todo menos en el nombre. Mucho drama, niveles espectaculares, una campaña memorable y una banda sonora increíble.
Todos estos elementos se mantienen en el salto a PS5 con Project Wingman: Frontline 59. Encima, ¡hay más juego! La nueva campaña, pese a su brevedad, es fantástica. Variada, intensa y acabando con otro jefe final que nos dará un chute de adrenalina espectacular.
¿Ha sido decepcionante que no todo el juego sea compatible con PS VR2? Desde luego. Aun así, las misiones que podemos disfrutar son espectaculares, y como juego en plano, estamos ante una verdadera joya. Así que, si os gusta Ace Combat, ya estáis tardando en poneros el casco para combatir en esta nueva batalla por conquistar los cielos.
Nos consolamos con:
- Igual de espectacular que en PC y cargado de contenido
- La nueva campaña es breve pero súper intensa
- Más música de gran calidad
- Lo inmersivo y divertido que resulta jugar en PS VR2…
Nos desconsolamos con:
- … Pero sólo se puede jugar en VR a la campaña Frontline 59
- Los recortes visuales en VR, además de mantener ciertos errores de PC
- Seguimos sin checkpoints en las misiones
- Leer subtítulos y luchar a cientos de kilómetros por hora sigue sin ser compatible
Análisis realizado gracias a una clave para PS5/PS VR2 proporcionada por Humble Games.
Ficha
- Desarrollo: Sector D2
- Distribución: Humble Games
- Lanzamiento: 03/10/2023
- Idioma: Textos en Castellano y voces en Inglés
- Precio: 29,99€
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