El mercado de la Realidad Virtual está claramente dominado por Meta Quest 2. Es el visor más popular, el más vendido, y el que está haciendo que más juegos se vendan. Pero la competencia es buena, para que nadie se duerma en los laureles. Ha habido varios intentos, pero si ha habido una empresa que ha ofrecido algo más interesante, palpable y que de verdad puede plantar cara a Meta es claramente PICO XR. Ya lo intentaron con PICO Neo 3 Link, pero el plato fuerte es PICO 4.
Anunciada y puesta a la venta casi de golpe, en la Gamescom las gafas me sorprendieron notablemente. Eran no sólo el primer casco que estaban a la altura de las expectativas: las superaban en varios puntos. Así que, tras varias semanas probándolas de manera exhaustiva, llega el momento del veredicto final. ¿Son las PICO 4 una buena alternativa a Meta Quest 2? ¿Es un buen visor para comprar estas Navidades? ¿Ofrece una buena experiencia PCVR además de en modo standalone? Poneos cómodos, que es el momento de responder todas estas incógnitas.
Especificaciones técnicas – El mejor hardware a un precio asequible
Lo primero es lo primero, ¿cómo de potentes son las PICO 4? Reaprovecho la tabla que ya hice, donde se comparan las especificaciones técnicas del visor con las de su principal rival y su precedesor:
| SPEC | PICO 4 | META QUEST 2 | PICO 3 |
|---|---|---|---|
| Resolución | 2160×2160 (por ojo) | 1832×1920 (por ojo) | 1832×1920 (por ojo) |
| Refresco | 72, 90 Hz | 72, 90, 120 Hz | 72, 90 Hz |
| FoV | 105º | 90º | 98º |
| Lentes | Pancake | Fresnel | Fresnel |
| PPI | 1200 | 773 | 773 |
| IPD | Ajustable de 62mm a 72mm | 3 posiciones | 3 posiciones |
| RAM | 8 GB RAM | 6 GB RAM | 6 GB RAM |
| GPU | Adreno 650 | Adreno 650 | Adreno 650 |
| Procesador | Snapdragon XR2 | Snapdragon XR2 | Snapdragon XR2 |
| Cámaras | 4 Fisheye y 1 RGB 16 MP | 4 Cámaras Infrarrojas | 4 Fisheye |
| Batería | 5300 mAh | 3640 mAh | 5300 mAh |
De manera resumida, PICO 4 tiene unas especificaciones muy similares a las de Meta Quest 2, pero son superiores en varios aspectos destacados:
- Mejor FoV (campo de visión), en especial si en Quest 2 usamos el espaciador de gafas
- Ajuste IPD físico de 62 a 72mmm. Es posible ajustarlo por debajo, pero las lentes pueden apretar la nariz, por lo que no es recomendable
- Mayor densidad de píxeles en las lentes
- Uso de las nuevas lentes Pancake, lo que permite una mayor calidad de imagen
- Un ligero aumento de la memoria RAM, algo que ayuda a esa mayor densidad de píxeles
Por contra, la tasa de refresco se queda sólo en 72 ó 90 Hz, perdiendo la posibilidad de que la imagen se refresque a 120 Hz. En su gran mayoría, son mejoras, que se agradecen, pero no todas son palpables salvo en un uso cotidiano del visor.
Sí, el ajuste del IPD viene genial para adaptarse mejor a las necesidades físicas de la persona. El mayor campo de visión se agradece, pero no es algo tan sumamente gigante como para ser un factor diferenciador. ¿Lo que sí lo es? El passthrough a color.
Gracias a la cámara en el centro del visor, a la hora de ver el mundo real, ya no estaremos viendo todo en blanco y negro como en Meta Quest 2. Ahora todo lo veremos con unos colores bastante claros y una imagen más definida de lo que uno se podría esperar. ¿Nos envían un mensaje al móvil? Podemos sacarlo y ver el mensaje sin quitarnos las gafas.
Está claro que esta implementación del Passthrough no es perfecta. Igual en Meta Quest Pro el resultado es mejor, pero ya supone un avance tecnológico importante. Aún falta una mejor medida de la profundidad, o cuidar que la escala de la imagen se corresponda con la del mundo real. Debido a estos defectos, es posible que más de uno pueda marearse al estar mucho tiempo al usar el Passthrough. Personalmente no es el caso, y estoy deseando ver implementaciones de Realidad Aumentada en el visor. De nuevo, hay mucho que mejorar, pero cuando luego he pasado a Quest 2, volver al blanco y negro borroso ha sido un duro golpe de realidad.
También hay que tener en cuenta un factor clave: el precio. Estamos ante un visor bastante económico respecto a la competencia (sin ofertas navideñas de por medio):
- 429 € la versión de 128 GB
- 499 € la versión de 256 GB
Es una política de precio muy agresiva, pero que hace el casco muy atractivo. Tener avances tecnológicos respecto a Quest 2 a este «bajo» coste es de lo más interesante de PICO 4, y uno de sus muchos, muchos aspectos positivos.
A nivel de batería, podemos jugar unas 2-3 horas antes de que toque recargar el casco. Si queremos ampliar la vida útil del visor, hay soluciones algo de «pegote», como la batería de Bobo VR, a la espera de que se hagan periféricos específicamente para este visor.
Ergonomía – El casco más cómodo y futurista
Este es otro factor clave a la hora de analizar un casco de VR, y PICO 4 lo borda. Es un visor muy bonito, con una estética futurista que recuerda mucho a Ready Player One. Su pequeño tamaño hace que parezca incluso más moderno, ya que el factor «forma» es algo que se ha cuidado. Estamos ante un dispositivo ligero, pero sobre todo, muy, muy cómodo.
De serie, PICO 4 ya trae un strap robusto para tener un diseño diadema similar al de PSVR o Meta Quest 2… Tras haber puesto el Elite Strap o algunas soluciones de terceros. Aquí no tenemos que tocar nada, ya que por defecto, tenemos un visor increíblemente cómodo. La correa para la parte superior de la cabeza nos da una sujeción extra, para que, junto a la rueda de la parte externa, el casco se adapte perfectamente a prácticamente cualquier tipo de cabeza.
¿La guinda del pastel? La distribución del peso. La batería está en la parte trasera del strap, haciendo que el casco parezca más ligero de lo que ya de por sí es. Por compararlo con Meta Quest 2, es infinitamente más cómodo que de serie. He estado varias horas seguidas con él puesto, sin notar ninguna molestia en la cara ni nada por el estilo.
Otra ventaja es que la esponja que trae por defecto (no hay covers de terceros por el momento) es bastante cómoda, pudiendo quitarla con mucha facilidad para que la podamos lavar tras una buena sesión de fitness. El sudor se queda pegado, y creedme, terminará por ser necesario. La única pega real que le veo a esta esponja es que, es posible que se pase algo de luz del externo en función de nuestro rostro. No es algo que ocurra siempre ni molesta en exceso, pero es una posibilidad.
Toda esta comodidad la notaremos, por ejemplo, con los juegos de fitness. Les Mills Bodycombat se disfruta más en PICO 4 que en Quest 2. El menor peso nos permite movernos y hacer ejercicio sin que el casco nos moleste, haciendo todavía más viable el usar la VR como herramienta para ponernos en forma.
Audio – ¿Dónde está mi Jack?
A nivel de audio, las PICO 4 funcionan de una manera similar a Meta Quest 2. Tiene unos altavoces en el strap, para que éstos acaben cerca de nuestros oídos. La calidad de estos auriculares es bastante buena, y nuevamente, similar a lo visto en la competencia. Así podemos disfrutar de audio 3D envolvente sin necesidad de auriculares externos. Es algo que me encanta de estos visores standalone.
Aun así, hay veces que se puede querer enchufar unos auriculares. Igual se quiere hacer streaming, o no queremos molestar a nadie que nos rodee (algo se escucha de manera externa)… Pero no es posible en PICO 4. No hay una conexión Jack, lo cual es una decisión más que extraña, al no ser algo que deba ser muy costoso.
El micrófono tampoco es el de mayor calidad del mundo. Sirve para comunicarnos en los juegos o al grabar algún vídeo, pero el sonido se nota algo enlatado. Entiendo que se han tenido que abaratar costes en algún lado, y si había que hacer algún sacrificio, no me importa que sea este. Es un aspecto funcional, pero poco más.
Mandos – Los controladores casi perfectos para la VR
Como ya se ha convertido en un estándar, PICO 4 usa un tracking inside-out. O lo que es lo mismo: las cámaras del casco hacen un seguimiento de los mandos. Éstos tienen una forma nueva respecto a la de los Touch Controllers de Meta Quest 2, y me parecen todo un acierto. El mango es algo más largo, pero menos ancho. Así se tiene una ergonomía mejor para nuestra mano. O al menos, para la mía. Si nuestra mano es muy, muy grande, quizá haya problemas para sostener el mando correctamente, aunque es sólo una suposición.
El anillo que usan las cámaras para seguir el mando ahora cubre casi toda nuestra muñeca. Es una posición que «protege» más la mano en caso de que golpeemos algo. Además, permite que juntemos más las manos en ciertas posiciones… Pero algo menos en otras. Por lo general, me parecen unos mandos más cómodos para largas sesiones de juego, incluso cuando se trata de un juego rítmico.
La otra posible pega es que el botón de «grip» no tiene tanto recorrido como en los Touch Controllers, pero es algo a lo que nos acostumbramos fácilmente. La disposición de los botones es prácticamente la misma que en los mandos de Meta Quest 2, pero con varias adiciones:
- Hay un botón para hacer capturas en el mando derecho. Así es más fácil sacar fotos o vídeos de nuestras partidas, en vez de usar atajos que no siempre funcionan
- Ambos mandos tienen el botón Home, para volver al menú principal con cualquiera de los controladores
Para su funcionamiento, necesitaremos dos pilas AA por mando. Esto supone el doble de pilas que en Quest 2. Al menos, la duración de la batería es prácticamente la misma. Al llevar el doble de pilas, su peso les da más consistencia en las manos, lo que también ayuda a esa sensación general de robustez global.
El mejor aspecto de los mandos es, personalmente, la «vibración HD». Es similar a la de los Joy-Con de Switch, ofreciendo una mejor vibración que cualquier mando hasta el lanzamiento de los de PS VR2. En Contractors notaremos la vibración en la mano del arma, y en la otra si la usamos para reducir el retroceso, pero con un menor grado de impacto. En In Death: Unchained notaremos unas pequeñas vibraciones para simular que tenemos el arco tenso. No todos los juegos aprovechan esta tecnología, pero los que lo hacen, ofrecen todavía más inmersión.
Sistema Operativo – Este menú me suena mucho
A nivel de hardware, claramente PICO 4 es una delicia, ¿pero qué hay del software? Bueno, es aquí donde las principales pegas se pueden empezar a notar. A grandes rasgos, el Sistema Operativa es muy similar al de Meta Quest 2. Tenemos menús parecidos, para acceder rápidamente a la biblioteca, el listado de amigos o a la tienda. Sin embargo, se nota que no ha habido tanto refinamiento ni iteración, por lo que varios aspectos están aún muy por detrás.
El primero y más obvio: la aplicación móvil y la tienda. Es absurdo que en ambos casos tengamos que poner nuestra edad pese a tenerla ya en nuestro perfil. ¡Ya te he dicho que soy mayor de edad! Hace más farragoso el navegar entre juegos, ya que a poco que uno sea de +18, a volver a poner la fecha. Al menos, se queda en caché hasta la próxima vez que apaguemos/encendamos el visor o la app.
Dentro de la biblioteca, no podemos ni desinstalar rápidamente un juego. Si queremos borrar alguna aplicación, nos tocará ir a la Configuración, el menú para desinstalar apps, y elegirla ahí. Las funcionalidades en muchos casos están ahí, pero falta algo de mejora de UX (Experiencia de Usuario) para reducir al máximo el número de clicks para acciones relativamente básicas.
¿Aspectos positivos? Podemos llevar un recuento de las calorías quemadas en los juegos gracias a la app que va integrada, al igual que en Quest 2. El sistema de creación de avatares no está nada mal, aunque por ahora su uso es nulo. Seguramente para cuando se lance PICO Worlds, tendremos más opciones o realmente una forma de ver a los amigos con sus avatares personalizados.
En lo referente a otras opciones relativamente básicas, la captura de nuestras partidas es mejor y peor a la vez. Podemos tomar las fotos y los vídeos con diferentes resoluciones y relaciones de aspecto, incluyendo 1920×1080 píxeles. Sin embargo, todo está capado a 30 FPS, con varios tirones en los vídeos. A cambio, retransmitir al PC funciona estupendamente, viéndose muchísimo mejor que en Quest 2. Así que capturar así las partidas o enseñar a los amigos/familiares qué hacemos es mucho más cómodo.
En la parte más negativa, tenemos la falta de opciones de control extra. El tracking de manos existe, pero hay que activarlo si tenemos el Modo Desarrollador. Por desgracia, la tecnología no funciona muy allá si lo comparamos con Quest 2, por lo que aún tiene mucho, mucho que mejorar. No sé cómo se podrá jugar a Unplugged en condiciones, porque la precisión no es la más alta del mundo.
Así que, un poco una de cal y otra de arena. En general funciona todo bastante bien, pero quedan por pulir varios aspectos generales para tener la mejor experiencia posible… Pero aquí estamos claramente por detrás de la competencia.
Catálogo de juegos – Menos opciones y sin todo el contenido
Aquí es donde PICO 4 tiene su mayor defecto claramente. Meta Quest 2 tiene un catálogo de más de 300 juegos, y en en la tienda de PICO el número es inferior. Varios de los bombazos de la Realidad Virtual, como son Beat Saber, Population: ONE o Resident Evil 4 VR claramente no van a llegar nunca, al ser juegos de Meta. Sin embargo, al hablar de los juegos third-party, tampoco están todos. Hay ausencias notables, como Synth Riders, los I Expect You To Die o el reciente Among Us VR.
Algunos títulos famosos acabarán llegando, como The Walking Dead: Saints & Sinners o Red Matter 2, pero ya van con retraso. ¿Qué ocurre con los juegos que sí están? Por lo general, son versiones que, en el mejor de los casos, son iguales. En el peor, y esto es lo más habitual: están incompletas. No hay posibilidad de comprar DLCs, por lo que en juegos como Ragnarock, OhShape o ALTDEUS: Beyond Chronos no podemos acceder a sus contenidos adicionales. Así nos perdemos canciones extras, o el espectacular Episode Yamato. Que esto no esté implementado es absurdo, al poder comprar Pases de Batalla en los juegos F2P que hay disponibles, como Ultimechs o Gun Raiders.
Otras versiones directamente no están actualizadas. STRIDE no tiene el multijugador que sí existe en Steam VR o Quest 2. ¿Se juega de maravilla lo que hay? Sí, pero estamos comprando una versión inferior. El caso más grave es fácilmente el de Contractors. Los servidores aparecen indicados con textos en chino, y para más inri, no hay soporte para mods. Casi toda la comunidad juega en niveles personalizados, dejando a la versión de PICO prácticamente abandonada. Incluso In Death: Unchained, que es más inmersivo gracias a los mandos, va con 3 temporadas de retraso.
Este es un aspecto en el que PICO XR tiene que ponerse las pilas, para no sentir que estamos jugando a versiones inferiores. Si no sabemos nada de las otras versiones, igual no es problema, pero cuando hay un aspecto multijugador, entonces es algo que se convierte en un problema mucho más grave.
¿Hay juegos exclusivos? Aunque por ahora no hay bombazos (ya llegarán), en cierta manera, sí. No son exclusivos totales, pero sí en el mercado standalone. AGAINST se puede jugar de manera nativa de una manera estupenda, pese a no tener soporte para canciones custom. Immortal Legacy: The Jade Cypher también tiene una versión nativa más que competente. Se nota aquí que PICO XR es un visor chino, ya que estos «exclusivos» provienen precisamente de este país.
Experiencia PCVR – La comodidad ante todo
El uso principal de un visor standalone es claramente usar el casco como una consola independiente. ¿Queremos usarlo para PC? También podemos, ya sea mediante un cable USB-C o de manera inalámbrica. Lo primero es descargar el Streaming Assistant, que es la aplicación para PC de PICO XR. El objetivo de la compañía es que el visor sea mainstream, así que se busca la sencillez. Esta aplicación es una muestra de ello. Nada de preocuparnos por aspectos técnicos complejos ni nada por el estilo.
Elegimos si queremos que la calidad sea «Suave», «SD» o «HD», para consumir más o menos ancho de banda. Lo ideal es ir a por «HD» para aprovechar la resolución del casco, pero podemos ir trasteando hasta dar con los ajustes que mejor nos convienen. También elegimos entre 72 y 90 Hz… Y ya. Si queréis opciones más técnicas, hay que recurrir a Virtual Desktop, pero esta sencillez me ha gustado.
Al conectarnos desde las gafas, ya estamos directamente en el menú de Steam VR, sin pasos intermedios ni nada por el estilo. Es una capa de ejecución más liviana que en Meta Quest 2, al no tener que lanzar siempre el Oculus Home de PC ni nada por el estilo. Fácil, rápido e intuitivo a más no poder.
¿El problema? Cómo reconocen los juegos los mandos de las PICO 4. Los veremos perfectamente reflejados en los menús de Steam VR, pero luego cada título es un mundo. Lo ideal es que los reconozca como los Touch Controllers. Es el caso de Half-Life: Alyx, y dado que los botones son los mismos, todo funcionará como la seda. En otras ocasiones, el juego pensará que estamos usando las «maracas» de HTC Vive (como en Serious Sam 3 VR), o los Knuckles de las Valve Index (Borderlands 2 VR). Para poder jugar en condiciones, nos tocará cambiar la asignación de botones, lo cual añade una capa más de complejidad a todo el proceso. Es subsanable, pero claramente una capa de fricción más para los usuarios.
Afortunadamente, quitando estas pegas, la calidad de la imagen me ha parecido muy equiparable a la de Meta Quest 2. Tanto por cable como por casco la experiencia ha sido muy buena, sin notar lag apreciable ni artefactos en la imagen que molesten a la hora de disfrutar los juegos. ¿Puede que los haya? Seguramente, pero no me han impedido volver a gozarlo con la aventura de Alyx, o incluso alguna otra cosilla de PCVR. La calidad del juego por WiFi podría mejorar más adelante con la antena pensada para crear un punto de conexión directo con nuestro equipo, por lo que es un punto en el que PICO 4 cumple más que con creces.
Conclusión – ¿Una alternativa real a Meta Quest 2?
Tengo sentimientos encontrados con PICO 4. Por un lado, a nivel de hardware me parece el mejor visor del mercado en relación calidad/precio. Supera a Meta Quest 2, es más cómodo, los mandos me han gustado más, y en general, tienen un acabado superior pese a un par de pequeños aspectos donde es inferior. El passthrough a color es otro punto muy positivo, que pese a ser aún imperfecto, tiene potencial para usos geniales de Realidad Mixta más adelante. Todo a un precio mucho increíblemente competitivo.
¿En qué pincha el casco? En la parte del software. El Sistema Operativo es similar pero inferior al de Quest 2. ¿Lo peor? Un catálogo de juegos al que aún le queda mucho recorrido. Implementar sistema de DLCs, que los juegos estén correctamente actualizados, etc. Es el gran punto negro, donde se notan los años de Meta y su dominio en el mercado.
Así que, PICO 4 no es una mala opción para iniciarse en la Realidad Virtual ni mucho menos. Lo más importante, trae una alternativa real al mercado para que no haya un claro monopolio. Sí, todavía hay asperezas a limar, pero se tiene entre manos un producto lo suficientemente sólido como para disfrutar al máximo de la VR. ¿Es la mejor? Por el software, que creo es lo más importante, no, pero por suerte, es algo que se puede ir solventando poco a poco.
Así que, si PICO XR mantiene su compromiso con el visor, no sólo va a mantener a raya a Meta: puede superarla. Tienen a nivel de hardware un casco estupendo, y con algo de esfuerzo, pueden convertirse en otro de los grandes de la VR ya no sólo a nivel empresarial, sino también a nivel de usuario.
Nos consolamos con:
- Una relación calidad/precio fantástica
- El Passthrough a color se ve estupendamente pese a sus problemas
- Unos mandos increíblemente cómodos y una vibración fantástica
- El PCVR es fácil de usar y funciona francamente bien
- Un casco súper cómodo
Nos desconsolamos con:
- A nivel de Sistema Operativo le siguen faltando opciones y mejorar la UX
- El catálogo de juegos es muy inferior respecto a Quest 2
- Tener versiones incompletas o desactualizadas de juegos
- La ausencia de un conector Jack para los auriculares
Análisis realizado gracias a un casco de prueba enviado por Grayland PR.
Ficha
- Desarrollo: PICO XR
- Distribución: PICO XR
- Lanzamiento: 18/10/2022
- Precio: 429 € el modelo de 128 GB - 499 € el modelo de 256 GB
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