En 2017, cuando la VR todavía estaba en sus tímidos inicios, Oculus Studios y Ready at Dawn nos sorprendieron con Lone Echo, que podría considerarse como el primer AAA de la Realidad Virtual. Tal fue su éxito, que la franquicia ha crecido gracias a la popularidad del F2P Echo Arena, ahora conocido como Echo VR, que es básicamente una adaptación no oficial de «El Juego de Ender» que disfrutar junto a nuestros amigos.
Fue precisamente la primera parte una de las primeras experiencias que disfruté en Oculus Rift, un tiempo después y ya con bastante experiencia con PSVR, pero aun así se convirtió rápidamente en uno de mis juegos favoritos del medio. Tras mucha paciencia por la secuela y múltiples retrasos, además de un cambio de política muy claro por parte de Oculus Studios para centrarse casi por completo en Oculus Quest, Lone Echo II por fin está entre nosotros. ¿Volverá Ready at Dawn a triunfar? ¿Habrá merecido la pena la espera? Es la hora de volver al espacio para vivir una nueva aventura para el recuerdo.
Buenos días, cielo
Ese «2» en Lone Echo II no está solo para adornar, ya que la trama principal empieza justo después de lo vivido en la primera parte. De hecho, nada más empezar el juego nos harán pequeño resumen, para así estar al día para esta nueva aventura. En resumen, volvemos a ser Jack, un androide que acompaña a la capitana Olivia Rhodes en una estación espacial alrededor de Saturno. Cuando apareció una anomalía, al final terminamos viajando al futuro por culpa de un salto de FTL (Más Rápido que la Luz en inglés) y la influencia de una biomasa de lo más mortal.
Han pasado varios meses en los que Liv (el diminutivo de Olivia) nos ha estado reparando, hasta volver a pleno rendimiento. Así que, estamos 400 años en el futuro todavía alrededor de Saturno, en una nueva estación espacial de la que no sabemos nada. ¿Cómo hemos llegado hasta allí? ¿Qué nos oculta Juno, la nueva IA a la que conoceremos? Y lo más importante, ¿hay alguna forma de volver a casa?
Como estamos ante otra aventura narrativa, Lone Echo II pone un énfasis total en la trama, potenciando esta vez más el desarrollo del argumento con elementos de ciencia ficción sensacionales. Descubriremos más sobre la biomasa, conoceremos personajes nuevos, habrá líos con los viajes por el tiempo, y lo más importante, la relación entre Jack y Liv seguirá siendo el eje central del título.
El ritmo de la trama está muy logrado, ya que constantemente habrá giros de guion, descubriremos algo nuevo sobre la biomasa, o nos encontraremos ante otra situación donde tendremos las emociones a flor de piel por lo que nos harán vivir este gran elenco de personajes. Encima, esta vez asistiremos a una conclusión definitiva del viaje de estos dos grandes protagonistas, lo cual es siempre satisfactorio.
Inglés, el idioma del espacio
¿Cuál es el único problema de la historia? El idioma, ya que Lone Echo II está completamente en inglés. Esta es una pega ya demasiado común en la VR, pero que siga ocurriendo en un AAA de estas características, con una compañía como Facebook detrás, es absurdo. Con juegos musicales donde el idioma no importa no supone un problema real, pero cuando la narrativa es tan central para la experiencia, es una barrera muy importante.
Es cierto que la primera parte recibió doblaje y subtítulos en español neutro después de su lanzamiento, pero ahora mismo, entiendo que es algo que echará para atrás a los que no sepan inglés. Al menos hay subtítulos, con que si el oído no es vuestro punto fuerte, al menos podemos leer los diálogos.
Yo soy Jack
Si hay algo en lo que claramente triunfa Lone Echo II es en la inmersión, siendo de los juegos de VR donde más sensación de presencia tenemos. Sé que suena muy cliché, pero nos vamos a convertir en Jack, viendo claramente nuestro cuerpo, las manos reaccionan de forma realista en función de la superficie a la que nos agarremos, el inventario es físico, etc. Todo esto refuerza la unión con los personajes, y sobre todo, con Liv, mejorando así más la narrativa.
Esta inmersión se consigue también gracias al sistema de locomoción, que sigue siendo de los mejores que hay en VR. En vez de usar el stick o el teletransporte, al estar en gravedad cero, nos desplazaremos agarrando el entorno para después impulsarnos, como en nuestra cabeza nos imaginamos sería en la vida real.
Esta mecánica tiene un doble propósito, ya que al realizar un movimiento físico que nuestro cerebro asocia a la realidad, es menos probable que nos mareemos, pese a desplazarnos en ocasiones con bastante velocidad. Además de los agarres, contaremos con unos propulsores en las muñecas para ajustar nuestro movimiento, por lo que simplemente el acto de movernos por Lone Echo II es de lo más divertido.
Otro punto que añade a la inmersión es todo con lo que podemos interactuar en el entorno. Las interfaces holográficas funcionan realmente bien, podremos encontrar pizarras que nos permiten saber más sobre la personalidad de los personajes (algunas bromas de Liv son geniales), items con los que activar conversaciones en las que nosotros podremos crear nuestra propia versión de Jack por cómo respondamos (¿seremos más robóticos o se nos pegará el sarcasmo de Liv?) y un largo etcétera. Todo lo que está a nuestro alrededor parece real, lo cual es una auténtica delicia.
El espacio, la última frontera... Llena de peligros
A nivel de estructura, Lone Echo II sigue el mismo esquema de la primera parte, por lo que el juego nos propondrá sencillos objetivos a completar para avanzar en la trama. Como esta vez la biomasa es conocida, aparece mucho antes, ofreciendo nuevas mecánicas, además de más momentos donde desplazarnos con cuidado para no morir. Las muertes no tienen muchas consecuencias, y la reaparición de Jack está justificada dentro de la narrativa, al construir un nuevo cuerpo en los fabricadores que hay repartidos por la estación espacial. Puede sonar a una tontería, pero es un detallito que ayuda a mantener esa constante inmersión que el juego logra transmitir desde el primer minuto.
La biomasa esta vez no será sólo estática, sino que también habrá unos «enemigos» conocidos como Ticks. Atraídos por cualquier fuente de energía, ya sea material u orgánica, tendremos que distraerlos para pasar entre ellos, teniendo así una serie de rompecabezas sencillos, pero que aportan variedad. Por ejemplo, tendremos que hacer que se muevan activando y desactivando ciertos mecanismos hasta aislarlos para que no nos molesten.
Es una de las formas que tiene Lone Echo II de aportar variedad, algo que lo hará en todo momento. Sí, todo lo que hagamos será parecido, pero siempre habrá algo nuevo que hará que no nos aburramos, como un nuevo accesorio para usar, ya sea un conector para obtener información extra de los drones de la estación, o una «mano a distancia» para agarrar objetos lejanos.
¿Qué habrá al otro lado de ese asteroide?
Uno de los aciertos de Lone Echo II es que, a partir de cierto punto de la historia, la estación espacial en la que nos encontramos se abre por completo para que la exploremos como queramos. Sí, seguiremos teniendo unas misiones principales, pero también nos iremos topando con montones de objetivos secundarios con suculentas recompensas.
En las misiones primarias conseguiremos nuevas herramientas, pero en las secundarias, podremos obtener mejoras, como un escudo para Jack que resista mejor la radiación, unos propulsores de mayor duración, o incluso llegar a hacer que sean infinitos. Otra posibilidad es que descubramos más sobre la historia, ya sea de personajes principales, secundarios o de la propia estación espacial.
Por tanto, hay un doble propósito para completar estas misiones opcionales, lo que nos anima aún más a explorar hasta el último rincón del entorno. Que todo tenga tanta calidad es un plus, ya que no nos parecerá que se tratan de meras fetch quest. Así se consigue más variedad y darle más empaque al título, de forma que me ha llegado a durar unas 8 horas y media… Que casi jugué en un solo día de lo mucho que me enganché.
Ahora bien, hay un par de pegas pequeñas en lo referente a las mecánicas. En primer lugar, tuve un par de bugs por los que algún evento no se activaba, teniendo que reiniciar el punto de control más reciente. No es grave, al perder apenas unos pocos minutos de progreso. Lo mismo cuando se me crasheó el juego al configurar las opciones gráficas desde dentro de la partida, por lo que son «tonterías» que se pueden parchear con facilidad.
Lo que más me «molesta» es que, una vez iniciada la misión final, todo el contenido opcional se bloquea del todo. Nos lo avisan, pero al acabar la aventura no hay opción de volver a esa parte de la historia para lograr el 100% ni nada por el estilo. Como sólo tenemos una ranura de guardado automática, tampoco podemos crear un punto de salvado en ese momento, por lo que espero que más adelante Lone Echo II nos permita regresar para continuar nuestras investigaciones espaciales.
Gráficos de otra galaxia
Un aspecto donde Ready at Dawn no decepciona nunca es en el apartado técnico de sus juegos, y Lone Echo II no iba a ser una excepción. De lejos, estamos ante uno de los apartados visuales más espectaculares de la Realidad Virtual, lo que ayuda enormemente en la inmersión que tanto busca el título. Los entornos parecen reales dentro de la ciencia ficción que nos proponen, con montones de detalles y una gran legibilidad, para que sepamos siempre qué es interactuable, qué no, o incluso de qué época es cada nave/máquina por la interfaz con la que interactuemos.
Los personajes también se merecen una mención aparte, ya que su modelado y animaciones están a otro nivel. Las expresiones faciales de Liv son tan naturales, que nos ayudan a verla como si fuera una persona, en vez de un simple NPC. Que reaccione a nuestras acciones y gestos es un punto a su favor, sin que parezca una animación forzada ni nada por el estilo.
Las vistas que nos ofrece Lone Echo II son muchas veces para enmarcar, ya sea la inmensidad del espacio, el anillo de Saturno por el que orbitamos, la anomalía, los restos de una nave y un largo etcétera. Pese a estar en una estación espacial, los escenarios logran ser variados, para que siempre estemos viendo algo nuevo que nos dejará con la boca abierta.
A todo esto, el rendimiento del juego es bueno, pero es un juego bastante exigente. Con todo al mínimo y un aumento del MSAA para eliminar los dientes de sierra, ya estaremos ante un espectáculo de mucho cuidado. A medida que aumentemos la calidad gráfica, mejorarán las sombras para que no estén tan pixeladas o la calidad de las texturas, pero lo dicho, incluso con todo al mínimo estamos ante uno de los juegos más vistosos que he visto nunca en la Realidad Virtual.
Eso sí, al tener instalado Lone Echo II en un HDD, la carga inicial desde el menú principal es un poco larga, sin llegar eso sí a los umbrales de tiempo de Asgard’s Wrath en su lanzamiento. Sin embargo, en la zona más abierta, si nos movemos demasiado rápido, podremos provocar tiempos de carga de unos segundos para que el juego le dé tiempo a llevar nuestro ritmo. Lo mismo ocurrirá con algunas texturas, que podrán cargarse ante nuestros ojos. En las zonas más lineales no existe este problema, aunque igual con un SSD estas pegas se reducen.
En cuanto al sonido, Troy Baker y Alice Coulthard vuelven a interpretar a Jack y Liv respectivamente, ofreciendo unas actuaciones sencillamente fantásticas. El resto de actores hacen un trabajo estupendo, lo que nos ayuda a meternos más en cada uno de los numerosos diálogos que tendremos.
El audio 3D también es realmente bueno, para que notemos la biomasa brotando a nuestro alrededor, dónde ha acabado el objeto que hemos lanzado en uno de nuestros desplazamientos, etc. Incluso podremos notar el eco en las salas más grandes y vacías al hablar con Liv. Eso sí, la música es más bien escasa, pero Lone Echo II tampoco la necesita, ya que todo el audio y los diálogos son más que suficientes para hacer cada momento una auténtica maravilla.
Conclusión
Tenía muy altas las expectativas con esta secuela, pero Ready at Dawn las ha superado con creces. Lone Echo II es uno de esos juegos que justifican la existencia de la Realidad Virtual, ya que sin las Oculus, esta obra maestra de la ciencia ficción no sería posible. El viaje de Jack y Liv es sencillamente increíble, ofreciendo una trama estupenda con unas dinámicas entre personajes que son de las mejores que hay.
Al sumarle la inmersión total de la VR, nos encontramos ante un juego que es una experiencia única. Sí, se trata de una secuela muy continuista, volviendo a apostar por una aventura narrativa más «tranquila» que lo típico de otras grandes superproducciones. Si buscáis un shooter o algo similar, aquí no lo vais a encontrar, pero si «solo» queríais más de lo ya conocido, entonces Lone Echo II os va a fascinar.
Desde el primer minuto nos atrapará sin remedio, yendo siempre in crescendo hasta ofrecer una gran conclusión para el recuerdo. Es una pena que Oculus Studios no parezca que vaya a apostar más por AAA de este calibre para PC, porque Lone Echo II se ha convertido en mi juego favorito de la plataforma, por encima incluso de Half-Life: Alyx. Sencillamente, de lo mejor de la Realidad Virtual, de lo mejor del año, y todo un imprescindible que demostrará hasta el más incrédulo la magia de la VR.
Nos consolamos con:
- Una historia fantástica que cierra el viaje de Jack y Liv
- La relación entre los dos protagonistas es magnífica
- Inmersión total en las mecánicas y narrativa
- Técnicamente de lo mejor que nos encontramos ante la VR
- Grandes actuaciones por parte de los actores y un audio 3D sensacional
- Misiones variadas para ofrecer una aventura realmente completa
Nos desconsolamos con:
- Completamente en inglés. Una gran barrera cuando la narrativa es esencial
- Pequeños bugs que nos harán reiniciar algún punto de control
- Los tiempos de carga en las zonas más abiertas, y la asociada carga de textura
- Que igual no tengamos más AAA de este calibre para PC por parte de Oculus en el futuro
Análisis realizado gracias a un acceso anticipado proporcionado por Oculus.
Ficha
- Desarrollo: Ready at Dawn
- Distribución: Oculus Studios/Facebook
- Lanzamiento: 12/10/2021
- Dispositivo VR usado: Oculus Rift S
- Idioma: Textos y Voces en Inglés
- Precio: 39,99 €
Manuel says
Una verdadera lastima un juego de tal calibre sin traducir siquiera los textos al Español. Y 40 euros no lo justifica por lo visto.
Luis Miguel Calzada says
Desde luego, el idioma va a ser el factor determinante para muchos, sobre todo ahora que dicen que no está en los planes a corto plazo localizarlo a más idiomas. Una pena, porque lo dicho, es una auténtica maravilla a nivel narrativo para los que pueden entenderlo todo sin problemas.