Uno de los estudios más destacados de Oculus Quest es sin duda Drifter Entertainment. En PC ya destacaron con Gunheart, pero es en Quest donde más se hicieron notar gracias a Robo Recall: Unplugged, un port de uno de los juegos más punteros de la Realidad Virtual excelente a un dispositivo móvil. Por eso, no es de extrañar que hayan seguido su colaboración con Oculus Studios, lo que nos lleva a Lies Beneath.
En este nuevo juego vuelven a cambiar de registro, pasando de la acción desenfrenada de sus anteriores proyectos para adentrarnos en un shooter de terror con estética de cómic, desarrollado con Oculus Quest en mente, pero que también estará disponible en PC el 14 de abril. ¿Listos para luchar contra vuestros peores miedos y descubrir qué se esconde en las profundidades?
Uno de los puntos fuertes de Lies Beneath es la manera de presentar su historia. No estamos ante una experiencia que busque el realismo, sino que se nos hemos metido de lleno en un universo de cómic. Cada uno de las tres grandes secciones del juego arranca con un número de tebeo del que vamos pasando las páginas de manera virtual. Dentro ya del juego, incluso veremos recuadros con los pensamientos de nuestra protagonista, manteniendo así el espíritu de un cómic.
La trama, eso sí, es sencillita, pero tiene un buen gancho: controlamos a Mae, una joven que regresa a su pueblo en Alaska. Mientras va en el coche con su padre, sufren un accidente, pero al despertar, no encuentra a su padre por ningún lado. Así que, le tocará seguir su rastro de sangre por el bosque y el pueblo, que está lleno de monstruos y demás criaturas de locura. A medida que avanzamos, descubriremos más sobre la trama, pero nunca usando voces, sino solo los paneles de cómic. No sé si es una decisión estilística o de falta de presupuesto, ya que en algún momento tener algún diálogo igual habría hecho que el argumento cobrara más fuerza.
Pero bueno, lo que importa aquí son las mecánicas, ya que estamos ante un shooter de terror en toda regla. Sí, Lies Beneath quiere hacernos pasar un mal rato, pero no al dejarnos indefensos como en Outlast o The Exorcist, sino que aquí la idea es tener acción constante a lo Resident Evil 4, pero con más énfasis en el terror. Esto se consigue de varias maneras. Primero, con una ambientación excelente, gracias a una estética de cómic increíble, que refuerza la sensación de estar dentro de un tebeo muy, muy oscuro y siniestro.
A nivel de estructura, estamos ante un juego bastante lineal, en el que nos podremos guiar gracias a las chispas que suelta el mechero que siempre llevaremos equipado. Esto nos servirá sobre todo para saber cuál es el camino principal, lo que nos permite explorar caminos secundarios en busca de coleccionables o recursos, algo fundamental si queremos sobrevivir.
Para defendernos de las diversas criaturas que nos atacarán durante nuestro viaje, tendremos diversas armas tanto cuerpo a cuerpo como a distancia. El equipo lo llevaremos virtualmente encima nuestro, con un hueco reservado para el mechero, junto a dos huecos en las caderas, y otros dos en la espalda para las armas de mayor tamaño (la escopeta y el arpón básicamente), lo que da algo de inmersión, ya que tendremos que coger el arma que queramos de nuestro propio cuerpo.
Las armas cuerpo a cuerpo están bien representadas, con diversos parámetros de fuerza en función del arma, siendo el machete más poderoso que un palo afilado, pero siendo genial este último para poder apuñalar rápidamente en la cabeza, por ejemplo. Las armas también funcionan bien, al haber la posibilidad de recargarlas con un pequeño gesto manual (como empujar el cargador del revólver o la pistola) o con un solo botón, en función de cómo hayamos seleccionado los ajustes. Usar el mechero junto a un arma de fuego es bastante importante, ya que así tendremos una especie de puntero láser, y se marcarán los puntos débiles de los enemigos, lo que nos puede ser más beneficioso que usar dos armas a la vez, por ejemplo.
Dicho esto, el desarrollo de Lies Beneath es bastante bueno, al combinar momentos más de terror puro y duro con otros de acción, otros de tensión por la situación en la que nos metemos de lleno, etc. Por ejemplo, en alguna situación tendremos que esquivar a los enemigos porque no tenemos los recursos suficientes como para derrotarlos a todos, mientras que en otros, iremos armados hasta los dientes para sobrevivir el asalto de las criaturas a la cabaña en la que nos hemos refugiado.
Hay una buena variedad de situaciones para que el juego no se nos haga repetitivo, con momentos en los que estaremos más tensos que un sectario viendo «El Exorcista», como tener que ir andando sobre fino hielo con cuidado de que no se rompa y nos lleve a una muerte segura mientras seguimos disparando a los enemigos, o huir por todo un laberinto de trampas de un enorme perseguidor al que no podemos derrotar bajo ningún concepto. Otro punto a favor son los combates contra los jefes finales, al ser todos únicos e incluir a veces mecánicas completamente nuevas, como es el caso del combate final del juego, lo que asegura una sorpresa tras otra durante el transcurso de las 4-5 horas que nos dura Lies Beneath.
Pese a todos estos elementos positivos, hay ciertos aspectos que podrían haber estado más pulidos. Para empezar, el combate cuerpo a cuerpo deja algo que desear, convirtiéndose en un último recurso más por la satisfacción que produce que por su utilidad. Mientras que las armas sí que se quedan clavados con realismo en las superficies, a los enemigos los atraviesan sin que haya ningún feedback para el usuario. Sí, el enemigo reacciona al impacto, pero con una animación por defecto que no es que nos diga nada realmente ni sea tan satisfactorio como sacar la escopeta, ver cómo reventamos al enemigo de un disparo, y recargar la escopeta justo después de manera manual.
La calidad de los entornos también podría ser algo mejor. Los primeros compases de la aventura son bastante sosos, al ser un bosque con poca visibilidad y poco más. Hasta que no llegamos al segundo número no nos encontramos con escenarios interesantes tanto a nivel de mecánicas como en lo visual. Eso sí, la tensión siempre se palpa en el ambiente, sobre todo cuando notamos que nos estamos quedando sin balas, pero los enemigos siguen viniendo a por nosotros.
En este punto, igual algo más de variedad de enemigos no habría estado mal, ya que aunque visualmente sí van cambiando algo, a nivel de comportamiento suelen funcionar de una manera muy, muy similar entre ellos. Esto podría haber hecho los tiroteos más emocionantes y tácticos todavía, al tener que priorizar unos enemigos u otros, etc.
Otra pega que le podemos encontrar a Lies Beneath viene por las expectativas creadas tras jugar a Half-Life: Alyx, ya que aquí los entornos son más estáticos, sin tantos elementos interactivos como en la obra de Valve. Está claro que no afecta a nivel de diseño, pero siempre es algo que se podría haber cuidado un poco más.
Pasando a fijarnos en los aspectos técnicos, Drifter Entertainment vuelve a exprimir al máximo las Oculus Quest, para ofrecernos un juego que entra por los ojos desde el primer momento. La estética de cómic ayuda mucho a esto, ya que al no apostar por unos gráficos realistas, es capaz de impresionar con una menor carga poligonal. Ver el estilo artístico tan cuidado, con onomatopeyas que cambian en función de los disparos o golpes en según qué superficies, es una auténtica delicia, siendo fácilmente de los mejores juegos de Oculus Quest a nivel gráfico en este sentido.
Es cierto que puede haber algún pequeño tirón cuando aparecen los cuadros de texto que hacen avanzar un poco la trama, pero el rendimiento por lo general es excelente. Es de esperar que la versión para Rift S se vea algo mejor, pero gracias al marcado estilo artístico, Lies Beneath no parece necesitar muchas más mejoras gráficas, lo cual es impresionante teniendo en cuenta que estamos ante un chip que podemos encontrarnos en un dispositivo móvil.
El sonido también es excelente, gracias a unos efectos sonoros que ayudan a sentirnos dentro de este pequeño pueblo de Alaska, entre los ruidos que sueltan las criaturas o los pájaros, el resquebrajarse del fino hielo cuando vamos por encima y mucho más. Todo ayuda a crear esta opresiva atmósfera, que se ve acompañada por unas buenas melodías que suenan en el momento adecuado. Como mencionaba antes, no hay ningún tipo de voz (quitando algún que otro grito por parte de los monstruos), lo cual creo que es una verdadera lástima, ya que podría haber mejorado la narrativa.
Conclusión
Los chicos de Drifter Entertainment vuelven a demostrar su talento en la creación de excelentes títulos de Realidad Virtual, y además, en explotar las capacidades técnicas de Oculus Quest. Lies Beneath se alza como uno de los mejores shooters del visor, gracias a su increíble apartado técnico, fantástica ambientación y elementos de terror que nos harán pasar momentos increíblemente tensos.
Como amante de los cómics, tener la sensación de estar dentro de uno no había sido tan palpable como con este juego. Además, estamos ante un shooter de terror muy divertido (o aterrador, según se mire), con una atmósfera muy lograda, unos jefes finales ingeniosos y más de un buen susto de calidad. ¿Podría ser más largo o profundizar más en la trama con diálogos? Desde luego, pero eso no quita que, si estáis buscando un buen juego de terror y/o de acción, Lies Beneath sea de lo mejor que ofrece Oculus Quest en estos momentos.
Nos consolamos con:
- Artísticamente increíble. Realmente parece que estamos dentro de un cómic
- Los jefes finales son ingeniosos y divertidos
- La intensidad de muchos tiroteos y situaciones durante la aventura
- La lograda ambientación para que sintamos la opresión de la protagonista en este angustioso escenario
Nos desconsolamos con:
- Las 4-5 horas se pueden hacer algo cortas, y no hay mucha rejugabilidad para volver
- Se echa en falta una mayor variedad de enemigos estándar
- Puede que sea una decisión artística, pero unas voces habrían ayudado a la narrativa
- Aunque las armas reaccionan correctamente con el entorno, contra los enemigos es otro cantar
Ficha
- Desarrollo: Drifter Entertainment
- Distribución: Oculus Studios
- Lanzamiento: Oculus Quest: 31/03/2020 - Oculus Rift/S: 14/04/2020
- Idioma: Textos en Castellano
- Precio: 29,99 €
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