Sorcery

Desde que se pusiera a la venta, la trayectoria de Playstation Move no es que haya sido ideal, al tener sus mejores juegos exclusivos en el mercado digital y en las compatibilidades adicionales al control tradicional. Por eso, los que compramos ilusionados el sensor de movimiento esperábamos como agua de mayo un juego que explotara al máximo sus posibilidades sin tener que recurrir al género del shooter on-rails, deportes o minijuegos.

Dentro de esta categoría se encontraba Sorcery, que tras anunciarse hace ya bastantes años, ha lanzado su último hechizo para llegar por fin ante nosotros, y con él, la promesa de tener en nuestras manos todo un vende-Move. ¿Será el juego tan mágico como para lograrlo?

La historia está sacada de todos los clichés que os podáis imaginar de las películas de magia: hay un aprendiz (Finn), que desobedeciendo a su maestro y alentado por su amiga la gata Erline, empieza a explorar y a causar líos, que atraen a la malvada Reina de Pesadilla. Como se suele decir, el que lo rompe, lo paga, por lo que le tocará a Finn acabar con el mal que ha desatado sin querer por el mundo.

Lo mejor de la historia es que, a pesar de ser típica al máximo, el desarrollo de la misma es muy satisfactorio, y los dos protagonistas (Erline y Finn) son unos personajes geniales cuyos constantes diálogos a lo largo de la aventura hacen que nos interesemos más en sus objetivos. Para darle ese toque mágico a la historia, hay cinemáticas que se muestran como si estuviéramos viendo un libro, y aunque el estilo de la animación podría ser mejor, en su conjunto, nos encontramos con un simpático argumento que engancha de principio a fin a pesar de su simplicidad.

En cuanto al desarrollo de la aventura, nos encontramos con una aventura de acción que bien se podría asemejar a un God of War mucho más light: seguimos un camino predefinido con pequeños rincones ocultos para encontrar tesoros y mejoras adicionales, mientras que vamos abatiendo enemigos constantemente, hasta encontrarnos con algún que otro jefe final o un puzzle sencillito.

La mayor parte del tiempo la pasaremos combatiendo, y para ello tendremos que mover el Playstation Move como si estuviéramos sosteniendo una varita mágica. Dependiendo de hacia dónde lo movamos, lanzaremos el hechizo en esa dirección, pudiendo incluso curvar ciertos hechizos para alcanzar a los enemigos tras algún parapeto. Aunque al principio las peleas son muy simples al contar sólo con el hechizo arcano (el ataque principal) y el hechizo de tierra, según vamos desbloqueando el viento, fuego, hielo y electricidad, los momentos de acción van ganando en espectacularidad e imaginación.

Aunque cada hechizo tiene sus puntos positivos a la hora de usarlos, si combinamos varios (como hacer pasar un tornado por una barrera de fuego, y luego disparar el hechizo arcano para lanzar bolas de fuego por todos lados), nuestro poder destructivo aumentará, lo cual será clave para enfrentarnos a enemigos cada vez más numerosos y poderosos.

Los combates contra los jefes finales son la verdadera guinda del pastel para este sistema de combate, ya que no bastará con disparar a lo loco, sino que habrá que buscar qué hechizos (o combinaciones) son mejores, y así buscar los puntos débiles. Por ejemplo, el troll de hielo solo se ve afectado por el fuego, por lo que una táctica genial es la del tornado de fuego, que además recogerá las piedras que nos lance y se las devolverá, multiplicando así el daño que podamos causar.

Encontrar estas debilidades es lo que hace que los jefes finales sean tan divertidos, y sin duda, no habría estado de más que los combates normales hubieran seguido esta pauta, porque quitando los enemigos que nos encontramos hacia el final del juego, dará más o menos igual el hechizo que estemos usando para acabar con los monstruos de turno. Esto hace que pronto el combate se pueda hacer algo repetitivo, por lo que es un poco tarea del jugador el buscar esa variedad de hechizos (que se cambian con una facilidad e inmersión en la acción increíble) para mantener la acción interesante en todo momento. El otro gran problema del combate es la cámara, que aunque la podemos colocar detrás de Finn en cualquier momento, a veces nos jugará alguna que otra mala pasada.

En cuanto a los pequeños tintes de exploración, servirá para encontrar tesoros que vender o ingredientes que usar en la alquimia, mediante la cual realizaremos pociones con las que mejorar las capacidades de Finn. Este aspecto es bastante interesante (ya que echamos los ingredientes y removemos la poción con el Move), pero al final, es tan básico, que se te queda la sensación de que se podría haber hecho algo más. En esencia, al descubrir un ingrediente, probamos todas las combinaciones posibles con los demás (tengamos o no tengamos) para hallar las posibles recetas. No habría estado de más el que hubiera más posibilidades, y que no se encontraran de forma tan sencilla. Al menos, algunos pócimas tienen efectos cómicos como congelarnos o convertirnos en un cerdo.

Una poción que sí es primordial en el juego es la poliforma, con la que adoptaremos la forma de un animal cercano. De nuevo, esto es algo que podría haber dado mucho más de sí, ya que sólo controlaremos a Finn al convertirse en rata por un camino demasiado prefijado. Sin embargo, al transformarse en pájaro, veremos lo que hace en una cinemática. ¿Tanto les habría costado el permitirnos controlar al protagonista en esos momentos?

Los puzzles es otro elemento que se queda en una pequeña anécdota, al ser simples patrones de repetición en algunos casos, usar una combinación concreta de hechizos y poco más. Y en cuanto al resto de movimientos mágicos como la telequinesis o la reparación de objetos, simplemente se activan cuando es necesario para avanzar en el nivel, y ciertamente, el usar estos poderes con mayor libertad habría estado genial. Con todo esto, tenemos una aventura (el único modo del juego) que ronda las 8 horas, y que por desgracia, es poco rejugable. Al menos, los varios niveles de dificultad aseguran que todo el mundo consiga el reto que busca (en serio, los niveles más altos con una verdadera pesadilla), pero de nuevo, al terminar la historia, poco más se puede hacer en el juego.

Gráficamente, Sorcery es bastante correcto. El aspecto artístico es lo más destacable, cogiendo influencias de mundos mágicos clásicos y de la cultura celta con gran acierto. El Unreal Engine 3 sirve para mostrar estos escenarios con bastante calidad. Igual de destacable es la fluidez de los combates pese a los montones de efectos mágicos que hay por los niveles, pudiendo asistir en algunos momentos a unos buenos espectáculos visuales. Sin embargo, el juego no usa el motor al mismo nivel que, por ejemplo, Batman: Arkham CityMass Effect 3, por lo que en este aspecto cumple y sobresale más bien por el apartado artístico. El sonido sale mucho mejor parado, con una banda sonora muy buena, y un doblaje al castellano formidable de todas las voces.

Conclusión

Sorcery es el mejor juego que hay actualmente para Playstation Move, pero no es el título vende-Move que muchos esperaban. Sí, la aventura es realmente divertida, el control funciona a las mil maravillas, y las 8 horas de historia se te pasan volando con lo mucho que disfrutas matando bogeys y demás criaturas si logras una gran inmersión en todo lo que está pasando.

Sin embargo, se ve claramente que el juego podría haber sido muchísimo más si se hubiera dado más libertad al usuario, los puzzles fueran más complicados o el sistema de alquimia y mejoras fueran más complejos. Aun así, gracia al precio reducido con el que ha salido al mercado, se convierte en el juego perfecto si tenéis Playstation Move, y sin duda, marca un antes y un después en lo que puede hacer este dispositivo, por lo que esperemos que los demás desarrolladores tomen nota y nos ofrezcan juegos precisos, maduros y complejos en exclusiva para Playstation Move de ahora en adelante en lugar de que todo sean deportes, bailes o minijuegos.

Lo mejor

  • La precisión de Playstation Move y la inmersión que consigue en la historia.
  • La historia gracias a los dos protagonistas: Finn y Erline.
  • El apartado artístico y el apartado sonoro.
  • Los jefes finales.

Lo peor

  • Corto y poco rejugable.
  • Si no se varía el uso de hechizos, el combate se puede hacer repetitivo.
  • Demasiado lineal y con momentos desaprovechados. Podría haber sido mucho más.
  • La cámara.

Ficha

  • Desarrollo: The Workshop
  • Distribución: Sony
  • Lanzamiento: 23/05/2012
  • Idioma: Castellano
  • Precio: 39,95 € (79,95 € el Starter Pack)

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