Sólo una persona recién nacida o ajena al mundo de los videojuegos no conocerá el juego que hoy me toca analizar. Minecraft y su creador han pasado a formar parte por derecho propio de la historia de los videojuegos y a tener un lugar destacado dentro de estos. Su fórmula de representar un mundo pixelado de bloques en tres dimensiones ha cautivado a millones de usuarios desde que su primera versión beta apareciera en PC allá por 2009. Desde entonces el juego ha salido para varias plataformas como Mac, Linux, iOs o Android hasta llegar el día de hoy a la versión definitiva en consola, en concreto a Xbox 360. Todo un mérito para la consola de Microsoft intentar adaptar este juego de construcción y destrucción en el que compartir experiencia y conocimientos con otros jugadores, ya sea en local o a través de internet.
El éxito de Minecraft en sus versiones anteriores se basa en explorar y construir mundos imaginarios a nuestro gusto con una personalización casi absoluta de cada elemento, en sobrevivir a ciertos seres que viven en cuevas y salen al hacerse de noche, y en aprender como aprovechar los diferentes elementos que recolectamos en el juego para hacernos la vida más fácil. Una parte fundamental cuando inicias el juego en PC es aprender las acciones básicas, algo que aprendes por ti mismo o bien porque alguien te explica qué debes hacer. En la versión de Minecraft de Xbox 360, en cambio, encontramos un tutorial que nos irá mostrando los primeros pasos que luego tendremos que repetir en el juego para sobrevivir a la primera noche y sus monstruos.
La diferencia entre los jugadores de PC de Minecraft y consola está clara, mientras que los primeros aprenden paso a paso y lentamente a base de compartir conocimientos, los segundos lo tienen más fácil y rápido ya que Mojang se lo da todo “mascadito”. En diez minutos y tras seguir el tutorial habrás realizado acciones que un usuario de PC igual hubiese tardado días sin ayudas. Lo mismo pasa a la hora de crear herramientas, utensilios, enseres o accesorios para nuestro personaje. Al apretar el botón Y podremos ver dividido en secciones los objetos que podremos crear y los materiales que necesitamos estarán marcados de color rojo, mientras que los que ya poseemos no tendrán esa marca. Ni siquiera tendremos que comernos la cabeza para saber en qué posición de las casillas va cada objeto, algo que sí ocurre con la versión de PC.
Por tanto Minecraft para Xbox 360 ha perdido ese toque de autoaprendizaje y de buscarse la vida para salir de apuros, a veces con ayuda de la wikipedia de Minecraft o bien a base de otros usuarios del juego que han formado grandes comunidades que han llegado a realizar mundos virtuales que imitan a cualquier otro existente en la realidad o en la mente de otro artista. Ahora nos limitamos a saber el material que nos hace falta para conseguir ese objeto que está presente en el inventario. Aunque quizás es lo que los jugadores de consola queremos. Por poner un ejemplo, mi mujer prefiere jugar a la versión de PC y no se aclara con la versión de consola, mientras que a un servidor le atrae más esta versión por su juego directo.
Otra de las diferencias es la creación del mundo virtual que se genera al entrar en el juego la primera vez. En las versiones de PC podemos jugar en modo local o bien entrar en uno de los servidores disponibles y jugar con otros usuarios. En Xbox 360 nos limitamos a generar este mundo en nuestra consola y compartirlo localmente con otros usuarios o bien invitar a amigos a que se conecten mediante invitación. La partida debe ser grabada al salir si no queremos perder nuestro progreso y nuestras pertenencias. Os recuerdo que en Minecraft se muere, pero nos regeneramos y volvemos a aparecer en un punto inicial del mapa. Nuestras pertenencias se quedarán en el punto en el que nos hayan matado anteriormente, y si las queremos recuperar no nos quedará otra que ir de camino hacia allí y enfrentarnos a lo que anteriormente nos finiquitó, excepto que hayamos caído en la lava. De ahí está claro que no podremos recoger nada.
Una novedad en esta versión es la posibilidad de jugar localmente hasta cuatro jugadores en la misma consola y compartiendo la misma pantalla. En principio resulta atractivo pero como no dispongas de una pantalla realmente grande la experiencia no va a resultar demasiado gratificante. Ni siquiera jugar dos personas en pantalla partida resulta muy cómodo. Cada uno con su pantalla como en la versión de PC es lo suyo.
De todas formas este port de Minecraft guarda la esencia del original y con tiempo y mucha paciencia podrás construir el mundo virtual de tus sueños y compartirlo con tus amigos, aunque el resto del mundo se lo pierda, de momento. No perderás ni un segundo en aprender las diferentes opciones y materiales necesarios para construir lo que se te ocurra y por tanto se trata de una versión con la que podrás iniciarte fácilmente en Minecraft. De todas formas si quieres construir o crear algo espectacular te recomiendo que mejor juegues a la versión de PC.
Conclusión
Si alguna vez has querido saber que atrae el resto del mundo a Minecraft quizás esta sea tu oportunidad de conocerlo. Juega solo o en compañía de tus amigos y en muy poco tiempo dominarás gracias a su interfaz de usuario todas las técnicas del juego y construirás lo que siempre has soñado. Una oportunidad única de disfrutar en consola de uno de los juegos de PC más innovadores y diferentes de los últimos años, aunque no a todo el mundo satisface, sobretodo a aquellos que buscan acción desenfrenada.
Lo mejor
- Poder jugar a este título, que ya resulta un clásico, en consola.
- Un buen tutorial te da los conceptos básicos del juego.
- Multijugador local…
Lo peor
- …. aunque para disfrutar de él necesites una pantalla bien grande.
- La versión de PC sigue siendo la mejor y más completa.
Ficha
- Desarrollo: Mojang
- Distribución: Microsoft
- Lanzamiento: 09/05/2012
- Idioma: Textos en Castellano
- Precio: 1600 Puntos Microsoft para X360
Mauro Capasso says
Me gustan los dos, pero el mejor es el de PC… 😀