DontNod son unos expertos en los juegos narrativos. Lo han demostrado con Life is Strange, pero también con sus pinitos en la acción como Remember Me o Vampyr. Ahora quieren seguir potenciando su faceta de la acción, pero sin olvidarse de la importancia de la narrativa, y así tenemos su próximo gran proyecto, Banishers: Ghosts of New Eden.
En Gamescom pude probar una extensa demo de una hora de duración, y aunque entré sin saber absolutamente nada del juego, quedé prendado de sus dos facetas más importantes: los personajes y la ambientación. ¿Os imagináis cómo serían los Cazafantasmas en el Siglo XVII? Porque en plena época colonial, las durezas de la época no son nada si sumamos los fantasmas y otras criaturas sobrenaturales que acechan en los bosques.
El cazador y la fantasma siempre unidos
La demo tenía lugar unas horitas ya dentro del juego, por lo que no había mucho tiempo para ponernos en situación. En Banishers: Ghosts of New Eden seguiremos a la pareja de Antea y Red. Son cazadores de espíritus, pero en su última misión Antea es herida de muerte, convirtiéndose en un espíritu. Ahora Red deberá buscar la manera de salvar a su amante de este cruel destino, además de seguir cazando lo sobrenatural.
Esta es la premisa, ya que en la demo todo giraba en torno a una de las misiones principales de la campaña. En un poblado se ha avistado una criatura que acecha desde los bosques, por lo que nadie tiene permitido salir de la zona. ¿Es un oso furioso o algo sobrenatural? Sea lo que sea, nos encomiendan cazarlo, viendo ya desde el primer momento varias dinámicas muy interesantes entre los personajes.
Por un lado, Antea y Red hablan todo el tiempo entre sí, comentando todos los eventos que van viviendo. De hecho, las interacciones con el mundo cambian en función de a quién controlemos, pudiendo tomar decisiones para ir forjando su relación como nosotros consideremos. Igual Red está de acuerdo con alguien pero Antea no, o viceversa. Diferentes formas de ver el mundo, y no sólo porque uno sea de carne y hueso y la otra sea ectoplasma.
En busca de la presa
Esta misión era bastante lineal y a juzgar por el mapa disponible, Banishers: Ghosts of New Eden seguirá un poco la estructura de los recientes God of War. O dicho de otra manera, zonas lineales interconectadas por regiones algo más abiertas. Así se da algo de libertad para explorar, pero sin perder el ritmo narrativo, que vaya si me enganchó a base de bien.
Mientras seguimos el rastro de la criatura, iremos descubriendo más sobre ella. Para sorpresa de nadie, es algo sobrenatural, que se ha formado por lo que ha ido aconteciendo en los bosques durante los últimos años. Estas revelaciones nos darán información sobre su origen, además de mostrarnos con otros ojos a las dos hermanas que conocimos en el poblado.
No quiero entrar en spoilers, pero la escena final de la demo me tenía con los pelos de punta. Pura emoción cuando se corre el telón, mostrando la dureza de este mundo, y cómo la gente intenta sobrevivir a su manera… Aunque no siempre sea la más ética. De nuevo, el talento narrativo de DontNod se pone aquí de manifiesto, ya que tanto la relación entre los protagonistas como todo lo relacionado con esta criatura es fascinante. Es verdad que siempre me ha gustado lo sobrenatural, con que era fácil conquistarme. Pero es el drama humano lo que promete elevar Banishers: Ghosts of New Eden, tal y como ha pasado con los hermanos Winchester en la serie Sobrenatural.
Luchando contra los espíritus a base de mosquetes
No estamos ante sólo un juego con una prometedora narrativa. Banishers: Ghosts of New Eden es un RPG de acción, que también bebe mucho de God of War en lo relacionado con su combate. La cámara estará muy cerca de nuestro personaje, y tanto nosotros como los enemigos pegamos muy fuerte. Hay cierto aire a Souls-Like, pero todo me pareció mucho más accesible. Nada de combates imposibles, ya que eso también jugaría en contra del ritmo de la historia.
Aun así, las peleas fueron bastante divertidas. Combinar los ataques físicos de Red (ya sea con sus armas o su mosquete), para luego pasar a Antea y pegar puñetazos de manera espectral, es la mar de divertido. Como Antea ya está «muerta», no sufre daño, sino que se consume su energía. Con que es un poco de «vida gratis», algo que nos puede venir de perlas para hacer daño espectral mucho más rápido, y así ventilarnos a los enemigos lo antes posible.
¿Va a ser un hack and slash memorable? No creo, la verdad. Tampoco los rompecabezas eran algo del otro mundo. Pero todo resultaba funcional, ágil a los mandos pero pesado a la vez para venderte la potencia de las armas. Y lo más importante, las peleas eran divertidas. El combate final contra la criatura estaba bien diseñado, siendo intenso por todo el bagaje narrativo que habíamos descubierto, además de por sus diferentes ataques según íbamos destruyendo sus puntos débiles.
Llamando a los Cafantasmas con señales de humo
Salí muy sorprendido de mi tiempo con Banishers: Ghosts of New Eden. Es justo la clase de juego que Focus Entertainment está potenciando tanto: un AA (con aire a AAA) que igual no va a ser una revolución, pero vaya si no tiene algo que te atrapa sin remedio alguno. En este caso, es claramente la ambientación y la historia. Estoy deseando saber más sobre esta versión sobrenatural de EEUU, y cómo no, de nuestro dúo protagonista.
Vampyr ya tenía una historia brillante, pero pinchó en el gameplay. Aquí parece que no va a ser el caso, con muchos elementos cogidos de God of War para crear algo que promete ser la mar de interesante. Así que, a poco que os gusten las historias sobre elementos sobrenaturales, no le perdáis la pista a Banishers: Ghosts of New Eden, porque puede ser una de las joyas ocultas de este completísimo final de 2023.
Deja una respuesta