A la hora de hacer un juego de plataformas, tienes dos opciones: optar por seguir las mecánicas ya típicas, pero ofreciendo un diseño de niveles excelente para destacar, u ofrecer alguna mecánica totalmente nueva. Esto último es lo que han decidido los chicos de Moon Factory Studio para su primer juego tras un proyecto universitario, y amparados por la iniciativa Playstation Talents para potenciar el desarrollo español.
Así ha nacido Rolling Bob, un curioso plataformas de scroll lateral en el que el personaje principal se mueve sólo, pudiendo controlarle directamente para acelerar, frenar o cambiar de dirección. La acción principal recae en algo que no se ha usado mucho esta generación, pero que se sobreexplotó en los inicios de la anterior: el sensor de movimiento del mando. ¿Podrá el giroscopio del Dualshock 4 ofrecer una experiencia divertida dentro de este género?
En Rolling Bob controlamos a Bob, un robot que tiene que rescatar a los demás habitantes de su pueblo después de haber sido secuestrados. El argumento es lo de menos, ya que aquí lo que importa es adentrarse en los 30 niveles del juego, repartidos en 3 mundos bien diferentes. La mecánica principal del título reside en usar el sensor de movimiento del mando para dibujar diferentes trazos en la pantalla, que Bob podrá usar para avanzar entre todo tipo de obstáculos, muy en la línea de los Kirby recientes donde se dibujaba un trazo de arco iris.
Por tanto, Bob es un personaje que va bastante a su bola, avanzando de forma automática, pudiendo decidir únicamente cuándo acelerar, frenar o cambiar de dirección. De esta forma, el peso de la acción recae en dibujar diferentes trazos para hacer que Bob «salte» diferentes obstáculos, frenar llamaradas de fuego y, en general, evitar todo tipo de peligros.
Para que no sea todo el juego igual, poco a poco se van incluyendo diferentes peculiaridades a estas mecánicas, como superficies resbaladizas que reducen nuestro control sobre Bob, enemigos que explotan al acercarnos, llamaradas, etc. Además, en cada mundo lograremos algún nuevo poder que aumenta las posibilidades en los niveles, como poder pegarnos a superficies magnéticas o teletransportarnos, lo que añade más variedad a la aventura. Además, al final de cada mundo hay un gran jefe final para que pongamos en práctica todo lo que hemos aprendido en los niveles anteriores.
En un principio, el método de control de Rolling Bob resulta de lo más atractivo, ya que el diseño de los niveles no es especialmente desafiante ni veloz como para pedir mucha precisión o tiempo de reacción por nuestra parte. Como os podéis imaginar, esto cambia al poco tiempo, y lo que al principio resulta simpático, termina por llegar a frustrar.
Básicamente, el giroscopio no ofrece la precisión necesaria para muchas de las tareas que nos piden, al moverse el puntero a veces como le da la gana. De hecho, tendremos que pulsar muchísimo el botón R3 para volver a centrar el puntero, porque se ha ido a paseo. Esto llega a frustrar bastante en los momentos más moviditos cuando no podemos frenar a Bob, y por tanto, reajustar el puntero y hacer la línea lo mejor que podamos.
De esta forma, nos encontraremos con muchas situaciones en las que parece que hemos muerto no tanto por nuestra culpa, sino porque los controles no dan para más. Otra pega es que Bob salta un poco cuando quiere al llegar a un hueco, lo cual a veces puede producir nuestra muerte.
¿Cómo reducir el fracaso entonces? Conociéndote los niveles casi al dedillo, para saber así dónde exactamente dibujar cada línea, y rezar para que el puntero reaccione en el momento adecuado en los momentos más agitados. Es una verdadera lástima, porque cuando todo funciona, la experiencia es de lo más satisfactoria. Por ejemplo, como Bob siempre está en el centro, mantener el puntero encima de él para ir creando un muro protector contra una serie de llamas mientras avanzamos es genial, o crear un puente de esta forma. Sin embargo, al necesitar parar tanto y reintentar tantas zonas por cosas insignificantes, la experiencia se ve afectada.
El diseño de niveles como tal no es malo, al esconder bastantes monedas para recoger (varias de ellas en lugares muy puñeteros para que nos arriesguemos al cogerlas, como en los plataformas clásicos) y los 3 Bits a rescatar. No es nada extraordinario, pero es bastante efectivo. Lo mismo ocurre con los jefes finales, que suponen un buen examen final para ver si hemos aprendido bien todo lo que hemos hecho hasta ese momento, aunque pidiendo quizá demasiada precisión para unos controles que no lo son tanto.
Con todo esto, los 30 niveles nos durarán alrededor de 10 minutos la mayoría, por lo que es un juego con una duración bien ajustada.
En los apartados técnicos, Rolling Bob no llega a destacar. Visualmente es resultón y simpático, pero no impresiona lo más mínimo. Al menos, su look de dibujos animados no está nada mal. El sonido es más criticable, ya que me he encontrado con niveles enteros en los que no había ningún tipo de música, lo cual resulta extraño. Cuando la hay, las melodías son simpáticas, pero igualmente, nada del otro mundo.
Conclusión
Como fan del género, realmente quería que me gustara Rolling Bob más de lo que lo ha hecho, pero la falta de precisión en su principal método de control es lo que más lo perjudica. La idea no es mala, pero no es aplicable para nada a una consola como PS4. En PS Vita, móviles o incluso PC podría llegar a funcionar la mar de bien gracias al uso de un ratón o una pantalla táctil, pero en PS4 el control se queda a medias, dejando vendido en más de un momento y dando la sensación de que los controles son los que fallan, y no tú.
¿Esto quiere decir que el juego es horrible? No, ya que cuando todo funciona, es bastante satisfactorio, y ciertamente resulta fresco jugar a un plataformas de esta forma. Sin embargo, hay que ser consciente de estos problemas para llegar a disfrutar este curiosa, pero por desgracia, algo fallida propuesta.
Nos consolamos con:
- Propuesta bastante innovadora, sobre todo al aprovechar un elemento casi nada usado del Dualshock 4.
- Apartado artístico simpático.
- Puede llegar a ser muy satisfactorio cuando funciona…
Nos desconsolamos con:
- … Pero no suele hacerlo. Le falta precisión al sistema de control.
- Falta de música en niveles enteros.
- Puede llegar a ser bastante frustrante por los controles.
Ficha
- Desarrollo: Moon Factory Studios
- Distribución: Sony
- Lanzamiento: 24/11/2016
- Idioma: Textos en Castellano
- Precio: 14,95€
Deja una respuesta